domingo, 26 de septiembre de 2010

Fátima


La localidad de Fátima es casi como un parque temático dedicado a la Virgen y a los tres pastorcillos. Al contrario de lo que me pensaba, es bastante distinto de Lourdes, quizás menos sofisticado, más devoto.

Nuestro hotel estaba muy cerca del Santuario de Fátima, uno de los más importantes santuarios marianos del mundo. En 1917, Lúcia de Jesus, Francisco Marto y Jacinta Marto (conocidos como "los tres pastorcitos"), afirmaron haber presenciado varias apariciones de la Virgen María. En una de esas apariciones les habría dicho que construyeran una capilla en aquel lugar, que actualmente es la parte central del Santuario donde está guardada una imagen de Nossa Senhora. Con el paso del tiempo el Santuario se extendió, hasta hoy en día en que existen ya dos basílicas, aumentando así la capacidad del acogimiento de los peregrinos en recinto abierto.

Al final de la explanada se encuentra la Iglesia de la Santísima Trinidad con 9.000 asientos, obra del arquitecto Alexandros Tombazis. Se inauguró el 13 de octubre de 2007. Es impresionante.

El Cristo se aparta de la imaginería conocida. La guía nos explicó que el escultor quiso combinar en él rasgos étnicos de todas las razas. Intento loable, pero poco logrado, a mi juicio.

La procesión nocturna de las antorchas, con peregrinos de tantos países diferentes, es muy conmovedora. La cara de espantadas que tenemos mi hermana y yo quizá se debiese a la concentración, a la emoción, o a que un señor regañaba en portugués a mi prima por tomarnos la foto.

2 comentarios:

Johnny dijo...

Los lugares religiosos siempre sacan lo mejor y lo peor de cada persona, tomándolo por el lado positivo disfrutaron de momentos de paz y espiritualidad, aunque por otro lado no lució muy bien el señor que regañó a tu prima por la foto (dónde dejó su espiritualidad y amor al prójimo, jajaja).

Mari Pau dijo...

Si que tenéis unas caras tristonas y asustadas.