La Momia 3

La Momia 3 es una nueva entrega de la serie que nos cuenta las aventuras del explorador Rick O'Conell, su esposa Evelyn y su hijo Alex, en esta ocasión enfrentados al resucitado emperador Han, una momia china multiforme que despierta de una maldición de 2000 años con el propósito de conquistar el mundo, liderando a su ejército de guerreros de terracota.

Siendo generosos, podemos decir que La Momia 3 se deja ver, y poco más. El problema es que, aunque las dos primeras películas eran claros pastiches de las de Indiana Jones, se notaba por parte de Stephen Sommers (Van Helsing) cierto entusiasmo y sentido del humor a la hora de contar la historia, y que se habia invertido una notable cantidad de dinero en la producción, que se notaba en la puesta en escena y en unos espectaculares efectos especiales (las imágenes de la Momia caminando en distintos estados de putrefacción al principio de la película, por ejemplo)

La tercera parte, por el contrario, está dirigida por un nuevo director, Rob Cohen, y se nota un poco su caracter de encargo y que no se ha invertido demasiado dinero en la producción. El guión deja un poco de desear, las escenas de acción y las persecuciones no están tan bien resueltas, y carece de momentos tan memorables como las entregas anteriores.

En cualquier caso, el problema está en los personajes. Aunque recuperamos a Brendan Frasier como aventurero derivado de Indiana Jones, el personaje de su esposa deja de estar interpretado por Rachel Weisz (El Jardinero Fiel) -que o se olió el fiasco o tras su oscar tiene un caché demasiado alto para una película como esta- y es sustituida por una Maria Bello (Una Historia de Violencia) que aunque resulta una agradable sorpresa no hace olvidar a la original. Supuestamente regresa el hijo de la pareja en esta tercera entrega, pasando de un crío de 10 años a un tipo de 25, lo cual hace dificil creerse la relación familiar, sobre todo con un Brendan Frasier que apenas parece llevarle unos pocos años.

También se echa a faltar un villano carismático como Arnold Vosloo, aquí sustituido por un Jet Li (Danny the Dog) que solo aparece en la película unos minutos como tal, ya que en su mayor parte es sustituido por una momia digital (o eso se dice, realmente es un guerrero de terracota virtual, parecido a los de Xiam). E igualmente, la aparición de Michelle Yeoh (Tigre y Dragón) apenas es poco más larga que un cameo, aunque comparte una bonita escena de lucha con Jet Li. Repite también algún otro actor, como John Hannah (Cuatro Bodas y un Funeral), aunque su personaje parece bastante perdido en la película...

En resumen, una entrega entretenida, pero poco memorable, que no está al nivel de las anteriores entregas...