Aunque llevo diez días trabajando (matrículas, papeleo, preparación de temas, llamadas, atención al público,…) hoy es el primer día de clases del curso 2015 / 2016.
Lo encaro con ilusión y la esperanza de no perder clases por enfermedad como el invierno pasado. Así, luzco sonrisa, aunque nunca será tan preciosa como la de Henry Cavill. Por muy hecha polvo que acabe el curso, tampoco estaré tan atractiva como él.
Deseadme suerte, amigos.
1 comentario:
Con mi incapacidad por el brazo quebrado apenas la semana pasada he regresado a clases y es muy pesado iniciar para ponerme al corriente con todo el papeleo.
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