Descubierta en el año 2000 en la mina de Naica (pueblecito del estado de Chihuahua, principal productora de plomo en el país) la cueva de cristales de selenita de hasta 10 metros de largo y un metro de ancho, se ha convertido en un lugar turístico de la región desde entonces. Fue descubierta accidentalmente cuando se exploraban las minas en busca de minerales, es única en el mundo y su aparición es temporal ya que durante millones de años se formó con ayuda de agua que temporalmente ha sido drenada por un sistema especial y este dejará de funcionar cuando se termine de explotar las minas, en ese momento la cueva volverá a ser cubierta por el agua y continuará con su crecimiento. Cabe mencionar que se encuentra a 300 metros de profundidad aproximadamente y a una temperatura de 50°C y mucha humedad y para su exploración ha sido necesario un gran esfuerzo tecnológico y personal.
2 comentarios:
Un lugar precioso. Lástima que sea perecedero.
Aquí en Cantabria pasó algo parecido con la cueva del Soplao, que tiene unas formaciones geológicas y minerales preciosas, aunque sin llegar a la espectacularidad de la cueva mejicana. El Soplao era una explotación minera y a principios del siglo pasado se descubrió la cavidad.
Aunque haga un calor insoportable, estar ahí abajo tiene que ser una experiencia increíble, como si te transportaran a otro planeta.
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