miércoles, 4 de agosto de 2010
Mojito
El Mojito es un popular cóctel originario de Cuba, compuesto de ron, azúcar (o jarabe de azúcar), lima , menta o hierbabuena y hielo picado, que últimamente está muy de moda en España.
Sólo he tomado tres en toda mi vida. El primero fue hace bastantes años en un pub de Campello al que fui con mi amiga Mª Ángeles y su hermana Inés pues un primo de ellas tocaba en directo allí.
El segundo fue el año pasado por estas fechas en Madrid. Pedro y Jesús se pidieron unas cervezas y a mí me dio por beber un mojito para refrescarme de los calores capitalinos. Jesús, que tiene mejor memoria que yo, os confirmará que no se me subió a la cabeza.
El tercero y último fue el lunes. Mis vecinos lituanos han abierto un bar en San Vicente hará poco más de un mes y anteayer los visitamos sobre las 8 de la tarde. Pedro pidió una horchata y yo, animada por los carteles del bar, un Mojito Cacique, servido desde un grifo que había en la barra. No sé si sería porque estaba muy cargado o escaso de hielo, o porque hacía horas desde que había comido, o sencillamente porque mi organismo no está habituado al alcohol, que se me subió a la cabeza como cohete y de pronto todo me daba vueltas y sentía la lengua de trapo, incapaz de articular nada coherente. Y eso que apenas llegué a beber dos tercios del vaso.
Puesto que ya conocéis mi nombre, sería absurdo apuntarme en Alcohólicos Anónimos. Lo que sí os aseguro es que voy a dejar la bebida, por lo menos hasta el verano que viene, que con un mojito al año es más que suficiente para mí.
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5 comentarios:
Yo todavía no he probado uno en mi vida, y creo que seguirá así por mucho tiempo. Si poco me gustan los refrescos nada las bebidas alcohólicas exceptuando la cerveza pero en poca cantidad. Soy la mar de aburrida.
Pues yo os recomiendo los mojitos, las caipirinhas, los piscos sour y las margaritas.
No es cuestión de tomarse uno a diario, pero sí de vez en cuando ... así los cuerpos se animan ... y podéis empezar a practicar en casa, ahora se encuentran ya botellas con los cócteles preparados y tomados, la mar de fríos, están de maravilla.
Además, si llegamos a los vinos, un Antonio Barbadillo bien frío, con unas sardinitas a la plancha, un buen Mateus ...
No soy alcohólico, pero un poquito de alcohol, de vez en cuando y en buena compañía, sienta de maravilla.
El mijito lo probé directamente en Cuba, para ser precisos en La Habana en mi viaje en los 90.s, todos los días nos daban uno en el bar del hotel (entonces fueron 7): Tampoco soy afecto al alcohol, pero me gustó mucho. La cerveza no me gusta mucho pero las que probé en España en mis dos visitas me gustaron y el vino (tinto) de vez en cuando lo pruebo (además dicen que una copita es muy buena para el corazón).
está bien eso de ser el único alcohólico reconocido ...
Se me olvidó contar la parte positiva: esa noche dormí como un tronco.
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