El oficinista

Sinopsis:
¿De qué abyecciones es capaz un hombre por aferrarse a un sueño?

El oficinista cuenta una historia que pasó ayer, pero que aún no ha sucedido, y, sin embargo, transcurre ahora. No es que el futuro esté cerca, es que tal vez ya pasó. Y nosotros no nos hemos dado cuenta, ocupadísimos como estábamos en cuidar un trabajo, un sueldo, una apariencia. Esta novela encierra una antiutopía, un mundo Ballard, pero también Dostoievski.”

Por mi cumpleaños, me regalaron este libro del argentino Guillermo Saccomanno, premio Biblioteca Breve. Lo acabé porque era corto. Es extremadamente duro, desalentador, no apto para sensibles, un retrato crudísimo de un modo de vida basado en la rutina y en la falta de esperanza. Entre el pesimismo de los clásicos rusos y la asfixia “kafkiana” la acción se sitúa en un tiempo futuro de características muy presentes. La ciudad en la que sobrevive el oficinista es de apariencia apocalíptica, a medio camino entre la de Blade Runner y Gotham City, donde la lluvia ácida, los continuos atentados, el estado parapolicial en el que se vive y los perros clonados, son el ambiente diario. Los personajes aparecen tan desnaturalizados que es imposible empatizar con ellos. Prometo que mi próxima lectura será más ligera.