lunes, 21 de marzo de 2011
El nuevo destape
He leído un artículo sobre la proliferación de desnudos en las series españolas, algo que ya me había llamado la atención. Y es que la ficción nacional pasa por una particular etapa de destape, en el que cualquier cosa vale para mostrar a un jovencito de cuerpo apolíneo con el torso desnudo, o a alguna jovencita de generosas curvas enseñando más piel que ropa.
Cualquier excusa es buena para que alguien aparezca desnudo En mayor o menor medida, series como El Barco (Antena 3), Ángel o Demonio (Telecinco), El Internado (Antena 3), Águila Roja (La 1), Física o química (Antena 3), Tierra de Lobos (Telecinco) o Hispania (Antena 3), no dudan en explotar los esculturales cuerpos de sus protagonistas, que siempre encuentran alguna situación que les exige deshacerse de la ropa. La audiencia responde haciendo de estas series líderes de audiencia y baluartes para las cadenas que las emiten.
En estas ficciones, cualquier excusa es buena para que alguien aparezca desnudo, sea sorprendido en la ducha, vistiéndose o desnudándose, y los personajes tienen una sorprendente tendencia a la promiscuidad, lo que les lleva a mantener relaciones sexuales que son profusamente mostradas en los capítulos de estas ficciones.
Pero el nuevo destape no es como el de antaño, el de la transición, donde las señoritas estaban de buen ver y los varones eran achaparrados y poco agraciados. La igualdad de sexos es una de las principales diferencias. Ahora, las series muestran por igual las anatomías de ellos y ellas, en un intento por hacerse con todo el espectro de la audiencia.
Según http://www.20minutos.es/noticia/982493/0/series/espanolas/destape/, el público mayoritario de estas series está compuesto por mujeres. Sólo tres ejemplos: la audiencia de El barco está compuesta por un 41,8% de hombres y un 58,2% de mujeres, la de Hispania, por un 46,7% de hombres y un 53,3% de mujeres y la de Águila Roja, por un 44,9% de hombres y un 55,1% de mujeres, según datos de Barlovento Comunicación.
También resulta curioso que no son las hormonas adolescentes las que cada noche conectan la televisión para ver a sus adorados y atractivos ídolos. De hecho, por edades, son los grupos entre 24 y 44 años y de 45 a 64 los que más siguen estas series dadas a la exhibición de las partes pudendas.
Pero, ¿por qué en una sociedad supuestamente moderna, con educación sexual y libertades, siguen llamando la atención los contenidos que recurren al reclamo del sexo y el desnudo? ¿O es que el hecho de que el sexo llame tanto la atención demuestra precisamente que la sociedad no es tan abierta como parece? Como consuelo, veo que la televisión española no tiene la exclusiva en este sentido sino que la comparten en mayor o menor medida el resto de las occidentales. Quizá no se vea, a causa de su hipócrita puritanismo, en las series de las grandes cadenas de Estados Unidos que emiten en abierto, pero sí aparece en las producciones de canales de pago como HBO o Starz.
Me pregunto si algún día llegaremos a la normalización.
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2 comentarios:
La sociedad es como aquel niño al que le prohiben tocar o tomar aquello y lo hace, así nos pasa hoy en día, nos decimos muy abiertos a todo,muy modernos pero todavía existe la moralidad doble. Ojalá los tiempos cambien ( o nosotros, jejeje)
Yo creo que es más simple, somos animales y nos mueve el sexo.
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