jueves, 6 de mayo de 2010

Ripio

He hecho esto deprisa y corriendo. Así estará ello, pero no me apetece retocarlo mas.

Hoy es un día en pena,
con paraguas desmembrados
asomando en las papeleras,
con palomas tullidas,
refugiadas en las buhardillas,
de casas en plena ruina.
Desde un cielo iluminado,
cuya protección ha fallado,
lluvia y viento castigan.
Colocaste el jarrón de barro fino
en el estante adecuado
con temeroso cuidado,
pero aun así ha caído
y miras los pedazos, desolada.
“¡Hice cuanto pude! – clamas-
¡Me desvelé toda una vida
para que nada lo derribase!
Paraguas, palomas, cielo templado…
cuanto probé no dio resultado”.
Es imposible restañar la herida,
detener el viento negro e infame
que golpea desde cada rendija
en la pared cubierta de grietas.
¡Qué cansancio, tener el alma prieta
y cubrir con manos desnudas
cada desgarradora fractura
mientras el frío se cuela igual!
Lo que impide desistir
es saber que al otro lado
ronda el final de lo amado,
la helada certeza del fracaso total,
que quita aliento al vivir.

4 comentarios:

Conchi dijo...

Si esta poesía la has escrito deprisa y corriendo y te ha quedado así de bien, habrá que leer lo que elaboras con más detenimiento, hija mía. Mi rendida admiración.

Mira que llevo años escribiendo y nunca en la vida me ha dado por el verso. La verdad es que tampoco soy buena lectora de poesía.

ana dijo...

Carolina, mis felicitaciones y en espera que si es posible sigas compartiendo tu poesía.

Johnny dijo...

Sigue escribiendo de prisa que te sale muy bien. No quiero no pensar cómo escribirás cuando tengas tiempo.

carolina dijo...

Gracias a todos por vuestros amables cumplidos. De todas formas, mucho me queda por mejorar para escribir algo aceptable. La estructura de la rima, por ejemplo, está hecha poco menos que a boleo. Ya se me han olvidado todas las formas poéticas que estudié en el insti. Pero con tantos animadores, no hay más que seguir intentándolo... y la próxima vez a ver si me molesto en repasar el manual de lengua y literatura.