Sinopsis:
En "Iron Man 2", el mundo sabe que el multimillonario Tony Stark (Robert Downey Jr.) es Iron Man, el superhéroe enmascarado. Sometido a presiones por parte del gobierno, la prensa y la opinión pública para que comparta su tecnología con el ejército, Tony es reacio a desvelar los secretos de la armadura de Iron Man porque teme que esa información pueda caer en manos indeseables. Con Pepper Potts (Gwyneth Paltrow) y James "Rhodey" Rhodes (Don Cheadle) a su lado, Tony forja alianzas nuevas y se enfrenta a nuevas y poderosas fuerzas.
Me la pasé pipa viendo a Robert Downey Jr. en Iron Man 2, el principal atractivo de la película a todos los niveles. Es inevitable que las pelis de superhéroes flojeen en la segunda entrega pues es en la primera donde explica lo más interesante: su origen, cómo se enfrenta a su nueva situación, el conflicto entre ambas personalidades, etc. Pero Robert es un actorazo y salva con su presencia el decaimiento del guión. Encarna a la perfección el Tony Stark más engreído y narcisista y al más vulnerable y casi moribundo.
Como antagonista, Mickey Rourke, qué tipo más repelente, no sólo ahora que la cirugía y el bótox lo han convertido en irreconocible, es que en los 80, cuando se supone que era un icono sexual debido a 9 semanas y media, tampoco me gustaba, nunca despertó mi libido. Junto a ellos, despliegue de efectos especiales y explosiones varias que comporta el género.
1 comentario:
Habrá que verla, porque las niñas les gusta y a Aymé le encanta el actor
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