Aunque no sé a ciencia cierta por qué, me cae bien Sandra Bullock. Así que por solidaridad femenina y porque es de mi edad me sabe mal que su marido (ya ex) le pusiese los cuernos con una pilingui tatuada, más aun sabiendo que habían iniciado los trámites de adopción de un niño hacía cuatro años. Se llevaron a este angelito para casa en el mes de enero, pero decidieron tenerlo oculto hasta después de los Oscars. A continuación, empezó todo el pollo del divorcio y la chica terminó la adopción ella sola.
A Sandra se le cae la baba con Louis Bardo Bullock (¿no había otro segundo nombre mejor?), que tiene tres meses y medio, es de Nueva Orleáns y posa a cámara tan bien como su recién estrenada mamá.
Sandra, a disfrutar de tu hijo y al sinvergüenza de tu ex que le den, que él se lo pierde.
1 comentario:
Que pena que en todas las premiaciones haya dicho que tenía un excelente marido que la aopyaba y le daba fuerza, para que a fin de cuentas le haya puesto el cuerno. Eso no se hace, pero bien por ella para que siga adelante con su bebé.
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