Sucker Punch

Sinopsis:
Ha sido encerrada contra su voluntad, pero Babydoll (Emily Browning) no ha perdido su deseo de sobrevivir. Decidida a luchar por su libertad, anima a otras cuatro chicas - la decidida Rocket (Jena Malone), la astuta Blondie (Vanessa Hudgens), la implacablemente leal Amber (Jamie Chung) y la reacia Sweet Pea (Abbie Cornish) - a unirse e intentar escapar de su terrible destino a manos de sus captores, Blue (Oscar Isaac), Madam Gorski (Carla Gugino) y High Roller (Jon Hamm).
Guiadas por Babydoll, las chicas entablan un combate fantástico contra todo, desde samurais a serpientes, con un arsenal virtual a su disposición. Juntas, deben decidir lo que están dispuestas a sacrificar para permanecer vivas. Pero con la ayuda de un Hombre Sabio (Scott Glenn) su increible viaje - si lo consiguen - las liberará.

Para muchos, entre ellos mi churri, una estupenda manera de pasar la tarde de un sábado es ver una película protagonizada por cinco jovencitas sexys en plan colegialas guarrindongas con tres kilos de maquillaje y una tonelada de pestañas postizas. Y en plan guerrero encima.

Para los que me estéis acusando de visión sesgada, de prejuzgar, os contesto que me propuse darle una oportunidad a la peli, así que aparqué el libro que estaba leyendo. Qué queréis que os diga: no estoy preparada para semejantes moderneces de estética comiquera hasta la saciedad. Nunca he jugado a videojuegos y justamente esa era la impresión que me daba, la de ir pasando pantallas. Me abrumaba tanta cantidad de efectos generados por ordenador, al servicio de un guion casi inexistente, además de confuso, que contiene dragones, samuráis, robots, orcos y hasta nazis zombies. Lo único que me gustaba era la banda sonora, de la que también se abusa. A la mitad de metraje Pedro estaba roncando, así que apagué el ordenador y seguí con mi libro.

No sabía si poneros la crítica de una peli que no he sido capaz de acabar de ver, pero ahí queda mi impresión.