Corteo, “cortejo” en italiano, es un desfile lleno de alegría, una procesión festiva producto de la imaginación de un payaso. El espectáculo combina la pasión de los actores con la elegancia y la fuerza de los acróbatas para que los espectadores se sumerjan en un mundo teatral y misterioso, en algún lugar entre el cielo y la tierra, que mezcla la diversión, la comedia y la espontaneidad.
El payaso representa su propio funeral, que se celebra en un ambiente carnavalesco, mientras unos ángeles de la guarda vigilan en silencio. A través de una mezcla de lo grande y lo pequeño, lo ridículo y lo trágico, de la magia de la perfección y el encanto de la imperfección, el espectáculo pone de manifiesto la fuerza y la debilidad del payaso, así como su sabiduría y su delicadeza para ilustrar esa porción de humanidad que reside dentro de todos nosotros. La música, lírica y pícara sucesivamente, lleva a Corteo a través de una celebración atemporal en la que la ilusión se burla de la realidad.
En agosto de 2008 fui a ver Quidam, un espectáculo del Cirque du Soleil y os lo conté aquí (http://cosasmias-cosesmeues.blogspot.com/2008/08/quidam-del-cirque-du-soleil.html). Quedé entonces tan fascinada que me propuse ver esta compañía siempre que tuviese ocasión. Tres años después han regresado a Alicante, esta vez con Corteo.
A algunas personas que han visto ambos montajes les parece que este no es tan bueno como el anterior. No estoy de acuerdo con tal afirmación. El problema es que se ha perdido el factor sorpresa de la primera vez. Me parece que aquí hay más y mejor humor y que los números circenses son igualmente espléndidos y provocan las admiratorias exclamaciones del público. Disfrutamos de un elegante número de acrobacia aérea en unos grandes candelabros; un arriesgado recorrido por una cuerda floja ascendente; un teatral desafío sobre una balanza; un enérgico y vertiginoso número sobre camas elásticas, por citar unos pocos. Se pueden ver en Youtube pero carecen de la magia del directo. Hay veces que suceden tantas y tan bellas cosas sobre la pista que da la impresión de que faltan ojos para abarcarlas.
Las entradas son muy caras, es cierto, pero, si tenéis la ocasión, no os lo perdáis. Voy a empezar a ahorrar para cuando regresen a Alicante.
1 comentario:
Es un espectáculo sin igual. Vale la pena su alto costo de entrada. Aquí en México solamente se han presentado en las tres plazas de mayor población, Cd. de México, Monterrey y Guadalajara, nunca en poblaciones regulares como la mía (que a pesar de tener 400 mil habitantes no es considerada entre las grandes). Así que me he conformado con la TV o Youtube. La próxima que lleguen a Monterrey (ciudad donde vive mi hermano y está a 4 horas de viaje) nos haremos el propósito de asistir, quiero que mis hijas lo disfruten.
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