Como el domingo no hacía demasiado frío, me animé a ir a la Casa de Cultura donde continuaba el Ciclo de Teatro con la representación de "Yo crecí con Fernando y tú con Sinatra", realizada por diferentes agrupaciones culturales de la vecina localidad de Aspe, entre las que destaca la Sociedad Musical y Cultural Virgen de las Nieves de Aspe. Estos grupos nos ofrecieron altruistamente este espectáculo con objeto de recaudar fondos para la Asociación Contra el Cáncer, de Agost, por eso el coste de la entrada fue de 5 €. Nada más que por colaborar en la causa, el salón de actor debería haber estado a reventar. Una lástima que no fuera así, ya no sólo por haber aumentado la recaudación sino porque la función era entretenida.
El hilo argumental, bastante flojo, giraba en torno a una joven, sus padres y sus amigos, que pasaban un día en el campo, mientras celebraban un guateque (curiosa reivindicación del baile “agarrado”) y comentaban el peso del primer amor y la posibilidad de segundas oportunidades. Entre escena y escena, acompañados de músicos en directo, aparecían cantantes que recordaban grandes éxitos de Sinatra, Camilo Sesto, Raphael, Rocío Dúrcal, Abba, Sergio Dalma y Nino Bravo, entre otros, que es lo que más valía la pena, no así el cuerpo de baile, bastante soso. En fin, que la gente se lo pasó pipa y le supo a poco. Al menos se abre una tercera vía, aparte de la zarzuela y la copla.
Luna, que fue con su yayi, aplaudía a rabiar. Al término, le pregunté si conocía las canciones y me dijo que no. Mi hermana contó que cuando ella las tarareaba, Luna no la dejaba cantar, le tapaba la boca la muy zorra. Le pregunté el por qué y contestó que su yayi y nosotras (mi prima y yo) éramos familia, y no los que estaban en el escenario. No sabe aún decir profesionales pero tiene bien claro el concepto y la diferencia con el resto de mortales que desentonamos.
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3 comentarios:
Pretendes que vayan al teatro a ver obras teatrales? Ilusa, si llevan al equipo de Salvame seguro que tienen lleno a rebentar.
¡Por favor, no me arrebates el mínimo de esperanza que me queda!
A "Sálvame" aún no, pero sí fue un autobús de paisanos nuestros a ver "La noria".
Ir al teatro es bueno y a precios económicos mejor. Aunque sea se entretienen por las melodías. Y mis felicitaciones a la pequeña Luna por darle su lugar a cada quien ¡qué inteligente!
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