La mañana del sábado la pasamos en Almería. Pocas cosas buenas puedo comentar de la ciudad ya que sus dos monumentos más destacados, la catedral (foto de arriba) y la alcazaba (cachito de la foto de abajo) , me eran totalmente inaccesibles.
Mientras el resto de la expedición subía a la alcazaba, me quedé en una terraza con otra chica que caminaba con muletas. Me vino bien porque en un kiosco de al lado que vendía souvenirs encontré el regalo perfecto de San Valentín para Pedro: una bufanda del F. C. Barcelona, el Barça de sus amores. Ni os imagináis la ilusión que le ha hecho, tanto que la ha colocado en una estantería junto a su escudo del Barça y sus tazas del Barça. Sí, amig@s, sí: mi piso se ha convertido en el museo del Camp Nou.
2 comentarios:
Es que como Pedro pocos hay ¡Visça Barça!
Qué cuestas, si parece mi pueblo.
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