S.E.C.R.E.T.

Sinopsis:
Cassie, la protagonista, es una mujer de treinta y tantos años, viuda desde hace dos pero separada desde hace más tiempo, que trabaja como camarera en un bar típico de Nueva Orleans. Una mujer que lleva una vida bastante anodina, de casa al trabajo y vuelta a casa donde vive con la sola compañía de su gato.
En el café en el que trabaja conoce a una mujer que le invita a entrar en una organización secreta que tiene por objeto que cada una de las participantes  desarrolle sus fantasías sexuales y consiga llegar a disfrutar plenamente de su sexualidad. Tras cumplir cada una de ellas –en un número de diez-, recibe un charm de oro, con una letra y un número romano para colgar en la pulsera de oro que le entregan al principio.
Si bien con dudas, Cassie acaba aceptando y la experiencia transformará su vida.

Entre la profusión de novelas eróticas que nos inundan (cuánto daño causan las modas, ¡como si se hubiese acabado de inventar el género!), la mayoría infumables, me ha agradado S.E.C.R.E.T.. Para empezar, se aparta del tópico de jovenzuela inexperta arrasada por la pasión de un semental de buen ver. En esta novela se trata de llevar a cabo fantasías sexuales, bastante realistas dado el género, en un entorno seguro con unos señores de toma pan y moja (ese requisito parece incuestionable, no seré yo quien ponga pegas) con tal que la protagonista aprenda a disfrutar del sexo disociándolo del amor para que en el futuro lo pueda reconocer. Según dice un personaje, es muy fácil y probable sentirse perdidamente enamorada de un hombre que acaba de proporcionarte un orgasmo sideral, pero no, eso no es amor. Además, el final sorprende al no ser el que parece predestinado conforme avanza la novela. Está lo bastante cerrado para concluir pero deja una puerta abierta a una continuación, lo que será lo más probable.