Se denomina pleonasmo o perogrullo a una figura retórica que consiste en producir una mayor intensidad en la frase a través de añadir términos redundantes, innecesarios desde un punto de vista formal.
Es decir, se trata en un sentido estricto de lo mismo que la redundancia, lo cual es considerado un error o a lo sumo un uso impropio, poco elegante, de la lengua. Sin embargo, en los casos en que dicho “error” es intencional o se lleva a cabo con fines poéticos, se prefiere el término “pleonasmo” (del griego pléon, “mucho”, y asmos, “de golpe”).
En todo caso, tanto el pleonasmo como la redundancia consisten en añadir a la oración palabras que podrían considerarse innecesarias, pues en lugar de añadir información nueva o relevante, insisten en la ya contenida en la oración o en una palabra previa, por ejemplo: “pared divisoria” o “persona humana”. Como se puede ver, ambos términos aportan la misma información, y por lo tanto bastaría con uno solo.
2 comentarios:
Sí, ja també dic molts "pleonasmos", queden emfàtics he he
És inevitable.
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