¿Y de aquello otro no dicen nada? Será porque no ha sido en la fachada de una iglesia. En realidad todo esto me parece un pelín exagerado. Aparte de que si las medidas son únicamente no besar ni dar la mano me parecen del todo insuficientes y ridículas. Todo el mundo tiene en mente la gripe A, a muchos hasta se les ha olvidado de que el mundo atraviesa una crisis económica. Quizá sea esto lo que se pretenda, no me extrañaría absolutamente nada. Ya se habló en su tiempo del mismo asunto cuando la gripe aviar, el mal de las vacas locas, el aceite de colza, la capa de ozono (esto fue a mí personalmente, un compañero de viaje cuando iba camino de La Coruña allá por 1997). Los gobiernos siempre han utilizado esas tácticas para que no pensemos tanto en otros problemas. Dicen nuestros mayores que allá en tiempos de Franco el modo de distraernos era por el fútbol y los toros, se realzaba mucho el Madrid, Di Stefano, Kubala, Puskas, El Cordobés,… En fin señoras/es, que atravesamos una crisis y que todavía existe una enfermedad llamada SIDA, aunque para estar a la última haya que contagiarse de la gripe A, que la otra está ya más anticuada que “El baile de los pajaritos”.
2 comentarios:
Por supuesto que es exagerado, más que nada por insuficiente y sobre todo por alarmista. Si –Dios no lo quiera- se diera el caso, seguiríamos las pautas que dictaminase el Ministerio de Sanidad.
Eliminar las muestras de afecto porque sí es estúpido.
Yo voy a tomar unas precauciones cuando se empiece el curso y no ya por la gripe A sino porque me pegan siempre de dos a tres resfriadotes, faringitis o lo que sea. Por ejemplo me voy a lavar más las manos.
Una anécdota: una niña con mucha moquita me ofrecia su libreta pues ahora con disimulo me cogeré un pañuelo para limpiarla y guardarla para corregir.
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