Sinopsis:
"El hombre es como una roca y la mujer es como el agua. Cuando el agua cae sobre las rocas, la roca desaparece, antes o después se convierte en arena. Es sólo una cuestión de tiempo. En el primer contacto del agua con la roca, la roca es tan fuerte y el agua tan suave, que lógicamente nunca puedes imaginar que un día el agua destruirá la roca, que se disolverá en arena y el agua seguirá estando allí. Esto es lo que Lao Tse llama el camino de la corriente de agua, la fuerza de lo femenino," "Todas las grandes cualidades son femeninas- amor, compasión, confianza, gratitud, amabilidad- todas estas cualidades tienen el aroma de lo femenino...Todas estas cualidades admirables son femeninas." (Osho)
¿A qué se refiere Osho cuando se refiere a la consciencia femenina? ¿Existe igualmente una consciencia masculina?. Se refiere no sólo a una serie de cualidades que generalmente caracterizan al género femenino, sino que también a una actitud, a una forma de actuar y de pensar, de concebir la existencia. Un hombre puede poseer éstas al igual que la mujer puede disponer de más cualidades masculinas...
¿A qué se refiere Osho cuando se refiere a la consciencia femenina? ¿Existe igualmente una consciencia masculina?. Se refiere no sólo a una serie de cualidades que generalmente caracterizan al género femenino, sino que también a una actitud, a una forma de actuar y de pensar, de concebir la existencia. Un hombre puede poseer éstas al igual que la mujer puede disponer de más cualidades masculinas...
En general, y haciendo un repaso por el papel que ha tenido la mujer en la toma de decisiones y las riendas de los hechos más importantes de la humanidad, este místico oriental rompe una lanza a favor de que el varón adquiera los valores propios de la mujer: el amor, la confianza, la compresión, la gratitud, la rendición, harían de éstos seres menos belicosos, más dialogantes y piadosos.
Osho también destaca que la forma correcta de vivir feliz en el presente, en total armonía y equilibrio con lo que nos rodea, es adquiriendo una consciencia femenina. Añade que no significa que el varón se convierta en afeminado, no tiene nada que ver, pone ejemplos como el de Jesucristo o Buda como hombres que actuaron de esta manera, convirtiéndose en seres justos y piadosos.
El problema de los libros de Osho, como bien me advirtió Esther, es que se repite más que el ajo. Una vez leídas las diez primeras páginas, el resto es darle la vuelta a lo mismo una y otra vez como si fuese un rumiante y, claro, aburre, por lo menos a mí que no tengo la capacidad de abstraerme para saber meditar.
El problema de los libros de Osho, como bien me advirtió Esther, es que se repite más que el ajo. Una vez leídas las diez primeras páginas, el resto es darle la vuelta a lo mismo una y otra vez como si fuese un rumiante y, claro, aburre, por lo menos a mí que no tengo la capacidad de abstraerme para saber meditar.
Tendré que proponerme firmemente dejar de perder el tiempo en libros como éste.
3 comentarios:
He de reconocer que admiro tu constancia y perseverancia.
Yo lo intente,pero fui incapaz.
En mi opinion este autor es cansino y aburre hasta las ovejas.
Yo tengo cosas mas importantes que hacer y que me llenan mas que perder el tiempo con semejante ladrillo.
Nunca he leído a Osho, aunque no es la primera vez que oigo que no hace más que repetir tópicos (por más razonables que sean) y llenarse el bolsillo a costa de la necesidad de la gente acerca de una nueva forma de ver la vida. Por lo visto, estamos tan necesitados de espiritualidad y de que nos recuerden cuáles son las cosas importantes, que nos compramos los libros de este señor, alguno de los cuales consisten en un par de frases por página. Sin entrar en si dichas frases son más o menos bellas, se podría argumentar que eso es un flagrante despilfarro de papel, aunque, ya puestos, también se podría decir, y con razón, que las memorias de la duquesa de Alba o de Ana Obregón también lo son y tienen mucha menos trascendencia. No lo sé. Lo que me escama un poco es que, según consta en la reseña, el señor Osho rompe una lanza a favor de las cualidades tradicionalmente atribuidas a la mujer y recomienda que los hombres vayan redescubriéndolas e incorporándolas a su psique, pues eso les hará seres más completos. Hombre, me parece muy bien, siempre y cuando se nos recomiende a las mujeres incorporar algunas de las cualidades tradicionalmente masculinas, porque ¿no será que al hacer del hombre un ser tan completo y perfecto implícitamente se nos quiere arrinconar de nuevo como los seres defectuosos de la creación? Porque si el nuevo hombre consta de cualidades masculinas (también valiosas) y femeninas, y la nueva mujer sólo mantiene las cualidades femeninas, me parece que estamos en ligera desventaja.
Pero seguramente Osho no insinua nada de eso. Todo lo más, este señor se ha buscado bien la vida como gurú New Age.
Tampoco he leído a Osho pero estoy de acuerdo contigo, Carolina. Y si como dice Esther, este hombre es repetitivo de tópicos, paso de leerlo aunque tenga bonitas metáforas.
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