Me voy a Tenerife

Argumenta nuestro amigo Juanfra que si el escaquearse del trabajo fuese bueno para el colesterol, los españoles seríamos los más sanos del mundo. Mi colesterol no debe de darme ningún problema pues el lunes que viene, Dios mediante, me voy a escaquear cinco días del trabajo. Os cuento: me han aprobado la solicitud para un viaje a Tenerife del 1 al 8 de diciembre con una asociación de discapacitados. Aparte de que es un poco (sólo un poco) más barato que con una agencia normal, lo bueno es que allí contaremos con transporte adaptado para hacer excursiones (no incluidas en el precio) por la isla.

Nunca me había pedido los días de asuntos propios a los que tengo derecho, pero no he querido dejar escapar esta ocasión. Presenté ya hace días la solicitud al alcalde y sería de las últimas cosas que haya aprobado antes de dimitir.

Por primera vez, pasaré el día de mi santo fuera de casa, por lo que me será imposible invitar a mis amigos y familiares a un piscolabis como solía hacer.

Una vez en Tenerife, Pedro y yo tenemos por delante una semana para descansar (meteré un libro en la maleta), hacer excursiones, comer más de la cuenta sin poder evitarlo (para eso llevo unas semanas controlándome), ir de compras (seguro que cae un perfume para mí y para Pedro todo el tabaco que la aduana nos permita llevar) y, entre unas cosas y otras, gastar la paga doble.

Estaremos en el hotel Noelia Sur, de 4*, cuyas fotos publicitarias os adjunto. Esperemos que no desmerezca la realidad y que el tiempo meteorológico haga honor al apelativo de isla afortunada.