jueves, 29 de abril de 2010
Todo por una chica
Sinopsis:
Sam está a punto de cumplir los dieciséis años y su pasión es el skate. Vive en el norte de Londres con su madre, una joven divorciada. A pesar de los temores de la adolescencia, a Sam las cosas no le van del todo mal. Ha superado el período de la separación de sus padres y los problemas con las odiadas matemáticas. Y ha conocido a Alicia, se han enamorado, y están en los eufóricos días del primer amor y de la primera vez. Pero, a pesar de tanta excitación, el chico no se siente muy optimista. En su familia siempre tropezaron con el primer peldaño, y a veces ni siquiera encontraron la escalera, entre los suyos parece haber un gen que les impide cumplir los sueños de ascender en la escala social. Y Sam se enterará de lo que todo el mundo sabe, que lo que más secretamente tememos siempre sucede. O sea que tendrá que vérselas con una iniciación a la vida muy movida. Y unos cuantos peldaños con los que tropezar... «Encantadora, conmovedora, irónica y divertida» (David Sexton, Evening Standard)
Ya os comenté cuánto me encanta la escritura de Nick Hornby, el autor de Alta fidelidad, así que busqué en la biblioteca de San Vicente alguna otra novela suya que no hubiese leído, y me topé con Todo por una chica, la historia de unos adolescentes que han de afrontar una paternidad no deseada. Siempre se le ha reprochado que sus protagonistas masculinos son adolescentes sempiternos, adultos con síndrome de Peter Pan. Aquí directamente la edad del personaje principal sí corresponde a la biológica. Me temo que no me convenció. Lo que le pasa es que no parece una novela de Hornby. Escasas referencias musicales, tono infatiloide, clichés, repeticiones de pensamientos de catorce años, situaciones manidas. No quiere decir que no sea buena, pero ni de lejos llega a sus mejores creaciones.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario