Sinopsis:
Paz tiene una vida aparentemente perfecta. Tiene
trabajo, pareja, amigas… pero algo falla. Se siente angustiada y agobiada, hay
algo que no funciona. En su desesperación acudirá a la consulta de un “sanador”
hindú, Amil Narayan, que le ofrece la solución a sus problemas: una poción a
base de plantas milenarias para liberar su tensión. La poción parece más
potente de lo esperado, y Paz se encuentra con un resultado sorprendente,
convirtiéndose, tras ingerir accidentalmente todo el frasco, en una mujer
"sin filtro"...
Más historias de
mujeres que logran el tan cacareado empoderamiento: el personaje de Maribel
Verdú en Sin rodeos. Tras tomar una poción mágica suministrada por
un curandero hindú (graciosísimo Santiago Segura, sorprendente director de una
película tan alejada del resto de su filmografía), se lía la manta a la cabeza
y planta cara a las egoístas de su hermana y su amiga, al chupóptero de su
novio, a la choni influencer que la deja sin trabajo y al niñato de su jefe. Es
una película para sentirse bien, para disfrutarla con amigas y pegarse un chute
de autoestima, a lo que contribuye la secuencia final con Alaska y todo el
reparto reclamando: “No quiero más dramas en mi vida, solo comedias
entretenidas…”
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