Sinopsis:
Jojo "Rabbit" Betzler es un solitario niño alemán perteneciente a las Juventudes Hitlerianas que ve su mundo puesto patas arriba cuando descubre que su joven madre Rosie esconde en su ático a una niña judía. Con la única ayuda de su mejor amigo imaginario, el mismísimo Adolf Hitler, Jojo deberá afrontar su ciego nacionalismo con las contradicciones de una guerra absurda.
Me estoy poniendo al día con las películas nominadas al Oscar, a ver hasta dónde puedo llegar antes de la entrega.
El fallo que le veo a esta película es que me parece que pretende abarcar demasiado: sátira, comedia, drama, trasfondo histórico... Las emociones son tantas que abruman, por lo menos a mí.
Vivimos la película través de la mirada de un niño de diez años que pasa su infancia inmerso en una guerra horrible que para él es un juego, hasta que se percata a las malas de lo tremendo de su entorno, de la falsedad que los nazis han inculcado a los de su generación.
No por muy tratada la época, viene mal revisitarla de vez en cuando, porque está visto que el mundo no aprende de sus errores. El odio a lo desconocido sigue imperante, por no hablar del adoctrinamiento y de las mentiras que promueven los regímenes dictatoriales. Y eso que en aquella época no existían las redes sociales para difundir el odio como sucede ahora...
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