Sinopsis:
Rebeca es una joven abogada que, tras su último desengaño, tiene claro que no volverá a sufrir más por amor y decide centrarse en sí misma y en su profesión. Una noche, cuando regresa a casa, se encuentra a Pizza, una preciosa perrita abandonada. A partir de ese instante todo en su vida cambiará. Pizza, una cazadora de piel y una niña encantadora harán que el futuro de Rebeca cambie totalmente, sobre todo cuando el sexi y archiconocido piloto Paul Stone se cruza en su camino y le enseña a perder el miedo a amar y a disfrutar de la vida. Pero inevitablemente algo provocará que Rebeca vuelva a sentir muchas dudas.
He leído que esta es la primera novela que escribió Megan Maxwell y ya contiene el germen de todos los puntos que la convertirán en una superventas. Lo raro es que, previa a esta, solo había leído Melocotón loco. Mirando en la balda de libros pendientes, veo que tengo otros tres de dicha autora. Algún día caerán.
Espero que sean tan deliciosos como este, una historia de amor donde, además de la pareja protagonista, el acierto reside en los personajes secundarios, tan bien delineados. Por señalar alguna pega, el recurso del embarazo, que a estas alturas debería estar desterrado, aunque supongo que las telenovelas actuales, por poner un ejemplo similar, seguirán sirviéndose de él.
Una lectura sencilla y amena.
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