Mi amiga Nati cumplió los mismos años que yo el día 7, pero pospuso la celebración al sábado 12 cuando nos invitó a las guapetonas a almorzar la típica coca a la pala, con la guinda que supone la deliciosa tarta de stracciatella y turrón de nuestra Rosa.
Dicen que la confianza da asco, aunque más bien sea un privilegio, así que le pedimos que se comprase el regalo que le apeteciera con el presupuesto que ella sabe que manejamos: un bañador, unas sandalias y un carro de la compra.
Un rato genial para ponernos al día de nuestras últimas novedades y disfrutar de la comida, pero sobre todo de la compañía.
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