Sinopsis:
Almería, 1952. Un hombre huye despavorido de unos jóvenes que lo acosan con perros adiestrados para matar. Su cadáver es abandonado, brutalmente mutilado, en una playa de la idílica Mojácar. Para resolver el crimen, la Guardia Civil envía al joven cabo Javier Bermejo a una misión que parece superarlo. ¿Quién es ese hombre? Cada dato lleva a una conclusión diferente: un espía alemán de la Gran Guerra, un noble seductor que ha hecho de la codicia su forma de vida, un jerarca nazi durante la Segunda Guerra Mundial, un judío que se unió a sus enemigos para huir de la barbarie…
Acercarse a un libro con ideas preconcebidas no es nada aconsejable. Es lo que me ha pasado. Siendo el autor, Jorge Díaz, un tercio de las mentes detrás de los thrillers brutales de Carmen Mola, me figuré que esta novela seguiría la misma tónica. Me equivoqué, evidentemente.
Sin prescindir de elementos de novela negra, marca de la casa, me he encontrado casi una novela histórica de la primera mitad del siglo XX europeo. De hecho, parte de la trama transcurre en la Barcelona de 1917, igual que La verdad sobre el caso Savolta, de reciente lectura. De haberlo sabido, habría pospuesto esta novela para más adelante.
Que conste que no me he arrepentido de haberme sumergido en una trama que pasea por el Berlín previo a la segunda guerra mundial, los campos de concentración, la Argentina receptora de nazis y la España profunda de los años cincuenta encarnada en un Mojácar que entonces era un pequeño pueblo de pescadores.
Una narración poliédrica, con saltos en el tiempo, bien construida y expresada, producto de la solera del autor.
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