Sinopsis:
La vida de Dražen Petrović, leyenda del baloncesto croata. Destacando su vida personal y su carácter único, haciendo hincapié en su profunda y compleja relación con el baloncesto, tanto su mayor pasión como su maldición.
En los años ochenta era muy aficionada al baloncesto: oía los partidos por la radio e incluso compraba la revista Gigantes del basket. Este biopic me ha retrotraído a aquella época. Dražen Petrović era un superdotado para este deporte. Lo admiré casi tanto como lo odié porque cuando jugaba en el Real Madrid se enfrentaba a mi querido Epi y porque en la selección yugoslava contribuía a dar palizas a la española, hasta aquella semifinal de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 1984 en que les vencimos y por eso ganamos la medalla de plata.
Aun así, me dolió de corazón su temprano fallecimiento por un accidente de tráfico en 1993. La película empieza y termina ahí. Entre medias cuenta, además de la deportiva, la vida familiar y amorosa, de la que no tenía idea pues entonces no se le consideraba figura mediática en España ni tampoco existía internet para enterarme.
Descanse en paz.
Vi la película doblada al castellano, pero solo he encontrado el tráiler en versión original.
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