Sinopsis:
Durante una fiesta de pijamas con sus mejores amigos, dos hermanos descubren que su madre, Margot, no es lo que parece. Ahora es un ama de casa normal y corriente, pero fue una ladrona de guante blanco que se acogió al programa de protección de testigos. Cuando ella y el padre de los niños desaparecen, obligados a dar un último golpe con el ex novio de Margot, los hermanos deciden formar un grupo para rescatarla a lo largo de una noche repleta de acción.
Estoy viendo muchas películas con tal de reducir la cantidad pendiente en estos pocos días que me quedan antes de reincorporarme al trabajo. Si apenas no comento ninguna es porque no me aportan nada reseñable.
Esta producción, que se puede ver en Netflix, no es nada del otro mundo, pero me ha resultado agradable de ver. Me ha recordado a la comedia familiar ochentera o a títulos como Spy Kids. Gustará a niños y preadolescentes, y no aburrirá a los padres que los acompañen porque también contiene referencias para adultos. A pesar de su punto gamberro, alocado e incluso un pelín escatológico, no pierde ocasión de reforzar los valores de familia y amistad.
Además, como aliciente añadido, sale Joe Manganiello, que se ríe de su papel de tío sexy, aunque no puede evitar tener el cuerpazo que tiene.
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