lunes, 16 de marzo de 2020

La chica que vivió dos veces



Sinopsis:
Lisbeth Salander está preparada para la batalla final contra la única persona que, siendo idéntica a ella, es su opuesta en todo: su hermana Camilla. Pero esta vez, Lisbeth tomará la iniciativa.
Mikael Blomkvist, por su parte, está investigando la muerte de un mendigo del que sólo se sabe que ha fallecido pronunciando el nombre del ministro de Defensa del gobierno sueco y que guardaba el número de teléfono del periodista en el bolsillo. Mikael necesitará la ayuda de Lisbeth, pero para ella el pasado es una bomba a punto de explotar.

Cuando me enteré de que el para mí desconocido escritor David Lagercrantz retomaría la saga Millennium de Stig Larsen, torcí el gesto. Luego pensé que, con unos mimbres tan sólidos, muy mal tenía que hacerlo para no salir airoso. Así, no me desagradó Lo que no te mata te hace más fuerte ni El hombre que persguía su sombra.
Sin embargo, esta última entrega, la supuesta despedida, no me ha dejado el buen sabor de boca que esperaba. Pensando en ello, me di cuenta de que el problema radicaba en la escasa presencia de Lisbeth Salander, icónico personaje donde los haya. Tanto sufrir, tanto luchar, tanto aguantar los desmanes de su hermana, para que el desenlace se despache en unas líneas sin dejar satisfecho a nadie que ame la saga, por lo menos a mí.

La trama que investiga Mikael Blomvist no me despierta ningún interés, ni en la desgraciada expedición al Everest, ni en el entramado de espionaje que lo conecta con Zalachenko, el infame padre de Lisbeth.

Creo que se merece un mejor desenlace y no me extrañaría que otro autor, si no el mismo, lo retomara.

1 comentario:

carolina dijo...

Lástima, el duelo Lisbeth/Camilla daba mucho de sí. Las hermanas opuestas, eternas rivales, condenadas a enfrentarse hasta que una elimine a la otra.