Un equipo cinematográfico británico recibe el
encargo de hacer una película patriótica para levantar la moral de las tropas
inglesas tras los bombardeos de la aviación nazi sobre Londres durante la
Segunda Guerra Mundial. El problema surgirá cuando se desencadene una auténtica
batalla de sexos.
Destacaré el amor al cine y su poder de ilusionar y evadir, lo que parece que
se haya perdido en lo que llevamos de siglo.
Aunque aquí no vaya de galán, Sam Claflin es un encanto y un atractivo añadido
a la hora de elegir una película.
No hay comentarios:
Publicar un comentario