martes, 24 de marzo de 2020

Drácula



Sinopsis:
El Conde Drácula se oculta bajo una apariencia enigmática. Pero en realidad, es un vampiro que perdió al amor de su vida hace cuatrocientos años. Cuando conoce al abogado Harker y a su mujer, Mina, Drácula se sumerge en sus recuerdos, ya que la prometida de Harker se parece a su amada. Por eso, el vampiro viaja de su lugar de residencia hasta Londres, donde acaba aterrorizando a los que les rodea.

Esta serie de la BBC para Netflix revive (perdón por el juego de palabras) por enésima vez el mito de Drácula. La verdad es que es tan sobradamente conocido que da un poco de pereza volver a él. Tres fueron las razones: son solo tres episodios (de hora y media cada uno), es de los creadores de Sherlock y el tiempo libre provocado por el confinamiento.

En primer lugar, la estética y el acercamiento son muy cercanos a los clásicos, al estilo de las películas de Bela Lugosi, con todos los tópicos de las uñas puntiagudas, los ojos inyectados en sangre, la desagradable presencia de moscas y otros bichos repugnantes, entre otros. Incluso el actor danés Claes Bang lo recuerda en gran medida. Por cierto, no lo conozco de nada. Para mí que le falta un toque más sexy.

Los dos primeros episodios se inspiran bastante en el relato de Bram Stoker. Para el tercero, como era de esperar de Mark Gatiss y Steven Moffat, la acción se traslada a nuestros días, lo que me recordó a Lucifer.

No está mal, pero tampoco me ha entusiasmado, la verdad.

1 comentario:

carolina dijo...

Teniendo en cuenta que cualquier cosa que nos distraiga un poquito tiene su valor en estos tiempos, si la serie está bien ambientada e interpretada, seguro que se deja ver.