El lado norte del corazón

Sinopsis:
En agosto de 2005, mucho antes de los crímenes que conmocionaron el valle del Baztán, una joven Amaia Salazar participa en un curso del FBI. Una de las pruebas consiste en estudiar un caso real de un asesino en serie a quien llaman «el compositor», que siempre actúa durante grandes desastres naturales atacando a familias enteras y siguiendo una puesta en escena casi litúrgica. Amaia se convertirá inesperadamente en parte del equipo de la investigación que les llevará hasta Nueva Orleans, en vísperas del peor huracán de su historia, para intentar adelantarse al asesino...
Pero una llamada de su tía Engrasi desde Elizondo despertará en Amaia fantasmas de su infancia, enfrentándola de nuevo al miedo y a los recuerdos que la dotan de un extraordinario conocimiento de la cara norte del corazón.

Habría sido una lástima que de un personaje literario con tanta fuerza como Amaia Salazar, con cuyas cuitas nos emocionó y nos aterró en la llamada Trilogía del Baztán (El guardián invisible, Legado en los huesos y Ofrenda a la tormenta) no supiéramos más, así que su creadora, Dolores Redondo, nos ofrece a los seguidores una precuela de la anterior. En teoría, se podría leer de manera independiente, pero creo que se disfrutará más si se conoce la susodicha trilogía.

Aquí seguimos a una Amaia más joven, en su preparación con el FBI y, en concreto, con su mentor, Aloisius Dupree, que también acarrea sus propios fantasmas. Si los de Amaia continúan en el Baztán, los del agente están enraizados en la mitología cajún de la zona de Nueva Orleans. Aquí es donde transcurre la acción para atrapar a un asesino en serie. En la investigación aparece como un personaje más el devastador huracán Katrina, acongojante en su destrucción física y moral.

A pesar de su considerable extensión y su quizá excesiva prolijidad en algunos aspectos, la novela se lee con interés y con ansias de pasar páginas para saber el desenlace, y al mismo tiempo con pena de despedirse de unos personajes icónicos.