Sinopsis:
Un año después de los eventos de "Los últimos Jedi", los restos de la Resistencia se enfrentarán una vez más a la Primera Orden, involucrando conflictos del pasado y del presente. Mientras tanto, el antiguo conflicto entre los Jedi y los Sith llegará a su clímax, lo que llevará a la saga de los Skywalker a un final definitivo.
Como sabéis, mi marido está hospitalizado y paso todo el tiempo que puedo con él. Me sentí mal por la traición de hace dos viernes, que me fui a ver esta película. Necesitaba una distracción fuera del Hospital. Quizá a causa de mi mala conciencia, no disfruté como debiera de la película; o quizá es porque le falta emoción. Mira que es oír la banda sonora, ver ascender los títulos de crédito y ponérseme los pelos como escarpias, y esta vez no. La película no me aburrió, pero tampoco la vi con la ilusión de antaño. El trío protagonista no llega a la suela de las sandalias del original, y son las apariciones de estos los que me conmueven, lo que demuestra que la intención de la película es contentar a los fans primigenios, así como a los nuevos, en un intento aceptable de concluir las nueve entregas, seis de las cuales eran prescindibles.
Al término de la proyección y la aparición de los primeros títulos de crédito, se abrió la puerta de la sala y empezaron a entrar los principales personajes de la saga, R2 incluido. Los espectadores nos quedamos atónitos y solo reaccionamos cuando uno de los actores bajo el disfraz anunció: Podéis acercaros a haceros fotos: es gratis. Y allí que fui sin dudar. ¿Os podéis creer que eso me emocionó más que la propia película?
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