martes, 14 de diciembre de 2021

Adiós a Verónica Forqué

 


La actriz Verónica Forqué fue hallada sin vida ayer en su casa de Madrid. Sanitarios de los servicios de urgencia del Summa 112 se personaron en su domicilio pero ya era demasiado tarde y no pudieron hacer nada por salvar su vida. La ganadora de cuatro Premios Goya se ha ido con tan solo 66 años de edad y después de haber abandonado 'MasterChef Celebrity' por el cansancio: "No me encuentro bien, estoy agotada. He luchado diez semanas, la experiencia de las mejores de mi vida (...). Siento no poder estar a la altura pero es que no puedo, el cuerpo no puede, no puedo con mi alma", expresó entonces.

Cabe recordar que la actriz ha padecido depresión a lo largo de su vida, primero cuando se separó de su exmarido Manuel Iborra en 2014 tras más de 30 años juntos y después cuando murió su único hermano, Álvaro.


Nacida en Madrid el 1 de diciembre de 1955, Verónica era hija del director y productor José María Forqué y de la escritora Carmen Vázquez-Vigo. Muy pronto supo que quería dedicarse a la interpretación y estudió arte dramático, además de iniciar la carrera de Psicología que jamás terminó. Gracias a su padre se sumerge en la industria cinematográfica en los años setenta y en la década siguiente ya está consagrada como actriz de comedia, llevándose en esos años ochenta dos Goyas en tres nominaciones: por 'El año de las luces' y por 'La vida alegre', en esta última gracias a su papel protagonista.


https://as.com/tikitakas/2021/12/13/portada/1639401269_169011.html


Qué pena más grande. Que encuentre en la otra vida la paz que en esta le faltó. 



2 comentarios:

Juanfra dijo...

La vi por primera vez en un capìtulo de "Curro Jimenez", titulado "la noche de las brujas", era una jovencita de unos 22 años que le robó el corazón a muchos. Hace dos años la conocí personalmente.

carolina dijo...

A mí también me ha dado mucha pena, y, si es cierto que las hienas de las redes sociales han contribuido a acelerar su triste camino hacia la autoaniquilación, también he sentido rabia. No sé hasta qué punto es eso cierto, pero en cualquier caso, espero que lo sucedido nos haga reflexionar antes de ir crucificando públicamente a una persona. No sabemos cuánto daño podemos causar con nuestras burlas, y deberíamos pensárnoslo dos veces antes de verter según qué comentarios por las redes. Pero ya sé que es inútil: cuando una nueva presa se ponga a tiro, esas hienas se dedicarán a despedazarla hasta dejar sus huesos blancos y mondos (citando a Juan Gómez Jurado en "La reina roja")