En algunos lugares de México sobrevive la costumbre prehispánica de comer insectos como grillos (chapulines), hormigas y gusanos, preparados de distintas maneras como fritos, crudos y en bebidas. Antes de la conquista española se hacía y después de la independencia se recuperó la tradición. En la actualidad hay restaurantes dedicados exclusivamente a la comida prehispánica en el centro y sur del país. A modo de observación, hace unos años al visitar Chiapas y Oaxaca (dos provincias de México) probé tanto hormigas y grillos fritos, unos en un taco con salsa picante y los otros solamente con limón y sal y debo reconocer que no me desagradó su sabor, así que si llegan a visitar mi país no dejen de probarlos para que vivan la experiencia.
3 comentarios:
Se agradece la sugerencia, Johnny, pero conmigo no cuentes. Con lo tiquismiquis que soy yo para las comidas...
Yo creo que si tengo hambre sí que comería algo de eso.
Qué buenos los chapulines, los he comido en Oaxaca con un mole de chocolate que estaba para chuparse los dedos. También he comido las ormigas, pero reconozco que no era la primera vez, pues en el Sudeste Asiático ya había comido hormigas y saltamontes. Y luego está el gusanito del mezcal. Qué bueno el mezcal. Ya lo dice Lila Downs, "cuentan que en Oaxaca se toma el mezcal con café ... "
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