Sinopsis
Una novela en la que el humor (negro, sobre todo, pero no sólo) es el protagonista absoluto y que, además, propone una visión "alternativa" de la vida cotidiana en la España de los años 60.
Que el negocio de su familia fuese la funeraria de Carabanchel durante muchos años le ha ofrecido a Juan Luis Cano la coartada perfecta para embarcarse en una historia castiza e irónica, ambientada en los ya míticos años sesenta, que gira en torno a ese oficio. A pesar del título, que para algunos podría insinuar algún vínculo con lo siniestro, el autor garantiza que La funeraria es una novela en la que el humor es una constante de la primera a la última página. A través de unos personajes singulares y de sus definitivamente insólitas peripecias, el lector tiene la diversión asegurada. ¡Hale, a disfrutar!
Para descansar de tochos interminables, saqué de la biblioteca de San Vicente unos cuantos libros de grosor moderado y temática ligera. Entre ellos se encuentra La funeraria, de Juan Luis Cano, la mitad del dúo humorístico Gomaespuma. Toda la historia gira en torno al humor, con aventuras inverosímiles, narraciones graciosas y personajes peculiares con una funeraria en el Carabanchel de los años 60 como telón de fondo. Como buena narración costumbrista, tampoco faltan algunos episodios agridulces, suavizados, eso sí, por el tamiz del humor y la amabilidad. Cano ama a sus personajes, se nota, y procura no hacerlos sufrir más de lo imprescindible. En general, el libro se lee muy rápido y es entretenido, lo que no es poco. Me extraña que no se lleve al cine o a una serie de televisión porque tiene buen material de punto de partida.
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