A mi marido y a mí nos encanta el campo. Somos más de campo que las amapolas y como no podía ser menos, este año la nochebuena la pasamos con mis padres en nuestra casa de campo de Agost (La mateta)... Mi marido encendió el horno de leña y la estufa para estar calientes y ya podía hacer frío, que nosotros estabamos en la gloria... Y como plato estrella de la noche, pato a la manzana y uvas, cocinado en el horno por mi marido, que el Ferran Adrià no le llega a mi Vicent ni a la suela de los zapatos ja ja... buenísimo, todo acompañado por jamón, vino de la casa y pan y turrón también de la casa, hecho por mi chef Vicent.
3 comentarios:
Habrá que probar las delicias culinarias de tu esposo. Eres muy afortunada de tener el corazón y el estómago bien tratados por tu pareja. Felicitaciones a los dos.
Que buena pinta tiene el pato y que suerte tienes de estar casada con tan buen cocinero.
Yo también quiero un cocinero.
Publicar un comentario