Nueve años después de que una infección convirtiese a gran parte de la humanidad en criaturas salvajes y sin intelecto, Patrick, Jack y Lu, una niña de nueve años, sobreviven en aparente tranquilidad en Harmony, un rincón olvidado, cubierto por nieves perennes. Sin embargo, algo terrible ocurrió entre Patrick y Jack y un odio profundo pervive entre ellos. Cuando las criaturas vuelven a aparecer, Patrick y Jack deberán dejar atrás el rencor para proteger lo que más quieren.
Ya sabéis que soy poco aficionada al género de terror. Dentro de sus variantes, de las que más detesto son las de zombis y similares. Con estas premisas os podéis preguntar por qué narices he visto esta película. Primero, porque quería ver un ejemplo del trabajo de uno de los varios directores españoles que exportamos allende los mares, casi todos especializados en terror. Segundo, por la curiosidad de ver a Clara Lago en un registro diferente a la comedia, lo más habitual en ella, y encima en inglés. Para sus fans, aviso que no sale hasta pasada más de una hora de metraje.
Por lo demás, es una película bastante intimista, de relaciones humanas que priman por encima de efectismos gore.
No puedo decir que me encantó ya que, repito, no soy partidaria del género, pero la acabé de ver, que es mucho más de lo que esperaba.
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