Sinopsis:
El veterano Will Sharp, en un acto desesperado por conseguir dinero para cubrir las deudas médicas de su esposa, recurre a la única persona que sabe que no debería, su hermano adoptivo Danny. Danny le ofrece participar en un robo a un banco, el más grande en la historia de la ciudad. Will no puede decir que no. Cuando su intento de escape sale mal, los hermanos secuestran una ambulancia con un policía herido y una paramédica. Ahora deberán huir de un inmenso dispositivo de fuerzas de seguridad desplegado por toda la ciudad, mantener a sus rehenes con vida y de alguna forma tratar de no matarse entre ellos.
El jueves vi Ambulance: plan de huida. Para empezar, ¿qué problema hay con titularla Ambulancia? No me explico semejante tontería.
Cuando una va a ver una película dirigida por Michael Bay, ya sabe el percal de lo que se va a encontrar con poco margen de error: acción a tope sin apenas un minuto de respiro. Así, se suceden las persecuciones en coche con la consiguiente destrucción espectacular de montones de vehículos. La pirotecnia de disparos y explosiones no se agota. Los movimientos de cámara son vertiginosos, a veces como si se estuviera a bordo de una montaña rusa. La adrenalina brota en las relaciones entre personajes, la mayoría al borde de la muerte. Para rematar, una dosis de moralina made in USA.
En fin, del género de películas que le gustan más a Pedro, pero que no me aburrió.
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