lunes, 13 de enero de 2020

Edmond


Sinopsis
Francia, finales del siglo XIX. Edmond Rostand es un dramaturgo prometedor, pero todo lo que ha escrito ha sido un fracaso. Gracias a una admiradora, conoce al mejor actor del momento, Constant Coquelin, que insiste en interpretar su próxima obra. El gran problema para Edmond es que todavía no la tiene escrita. Sólo tiene el título: “Cyrano de Bergerac”.

Por mucho que tildemos a los franceses de chovinistas como si fuera un defecto, hay veces que deberíamos aplicarnos el cuento e imitarlos en su amor y defensa de lo suyo.

Para muestra de lo anterior, esta película que me ha encantado. Si el Cyrano de Edmond Ronstadt es una de las obras cumbres de la literatura francesa, la más representada en los escenarios mundiales, qué mejor manera de homenajearlo que con una historia amable, cuya base real me figuro tirando a nula, pero que hace entroncar la génesis de la obra con el clásico que nació con la primera representación. Así, repasan las escenas más emblemáticas y emocionan una vez más con tan bella historia más grande que la propia vida.

A pesar de las múltiples versiones, mi principal conocimiento de la obra proviene de la película protagonizada magistralmente por Gérard Depardieu, y que me ha apetecido volver a ver.

2 comentarios:

MC Martínez Hernández dijo...

Mi conocimiento y fascinación viene de la versión de 1950, con José Ferrer en el papel de Cyrano. Posiblemente no la ví hasta los años sesenta, pero me fascinó. Mucho después vi la de Depardieu.
En estos momentos se puede acceder en Amazon Prime a Desmond con el título Cartas a Roxane.
Plenamente de acuerdo con lo que opinas. ES una historia preciosa.

Conchi dijo...

Muchas gracias por tu aportación, MC.