Una vez pasada la resaca del debate político, voy a poner unas letras dedicadas a la gastronomía local (Guadalupe, Cáceres). Una de mis debilidades es la morcilla negra.
Se presenta siguiendo la vieja receta de Guadalupe: grasa de Cerdo Ibérico, repollo o acelga, cebolla, sangre, hierbabuena, perejil, pimentón de la Vera, sal y ajo.
Se consume prácticamente desde el primer día. Mejor servida cocida, pero asada no deja de ser un manjar muy singular. Si alguna vez visitáis esta tierra os invito a este enorme placer, acompañada de nuestro pan hecho en horno de leña junto con una copa de vino de Cañamero.
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2 comentarios:
Aunque no la fabriquen en versión "light", no dudes que la probaré cuando vaya a visitarte. Tiene que estar buenísima.
Tiene muy buena pinta.
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