Sinopsis:
Pentesilea, la reina de las Amazonas, se encuentra con Aquiles de quien se enamora. La pasión, la lucha y la ambición les arrastra, en medio de un grandioso espectáculo, a la desgracia. El ejército de las Mujeres Guerreras al asalto de un corazón, el suyo y el nuestro, un corazón poblado de contradicciones, inundado por un torrente de preguntas. ¿Es el amor un tigre insaciable que envenena la razón? ¿Podemos escapar de su voracidad posesiva?
Para representar una tragedia de inspiración clásica, ningún escenario mejor que el Teatro Romano de Mérida. Cuando lo visité hacía pocos días que había acabado la temporada teatral, así que me quedé con las ganas. Otra vez será, que es el consuelo más socorrido a la par que falso.
No me habría importado ver esta obra, por ejemplo. Cierto que, a mi parecer, hay momentos que se pasa de intensa y me acabo perdiendo en algunos parlamentos ampulosos. Aun así, interesa la historia de las Amazonas, quizás las primeras superheroínas de las que se tiene constancia y que inspiraron al creador de Wonder Woman. Pentesilea, su líder, es una guerrera que, a su pesar, sucumbe al amor de Aquiles, que le trastoca el juicio. Interpretada por una maravillosa Silvia Abascal, salvaje y dulce a la vez, digna hija en la ficción de la no menos grande Loles León.
Entre los secundarios, un guapísimo Maxi Iglesias, al que le tengo un cariño especial desde que lo conocí en Madrid.
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