El viernes por la noche: la Guapetona Loli nos invitó a una merienda cena para celebrar su cumpleaños más de medio año después, ya que fue el 3 de diciembre, en plenas restricciones. Por los pelos, no hemos vuelto a las andadas: la Generalitat, en vista del aumento de positivos en covid, ha dictado nuevas medidas que entraron en vigor a las pocas horas de nuestra reunión. Por dicha razón, mi amiga pidió que la mesa estuviera en terraza. Lo mismo daba, porque estaba lleno de mesas: me sorprendió que tanta gente saliese a cenar en viernes. Del grupo habitual nos falló Merce por un problema de salud, pero, en cambio, disfrutamos de la presencia de María, que ya ha abandonado Grecia ya que por fin su marido ha sido destinado en Rota y allí se mudarán en unas semanas.
Cenamos una serie de aperitivos, tanto fríos como calientes, más tostadas con fiambre. Si no estábamos bastante llenas, Rosa nos regaló una trenza de hojaldre rellena de crema pastelera y chocolate.
Aunque tememos más cumpleaños atrasados por celebrar, de momento, debido al aumento de infectados, nos vamos a tomar un respiro de ágapes hasta que la situación mejore.
No hay comentarios:
Publicar un comentario