Sinopsis:
Una doctora camboyana llega a los Estados Unidos para recibir un tratamiento médico para salvar a su hijo, pero cuando el sistema falla y la empuja a esconderse, ella usa su astucia e inteligencia para contraatacar, infringiendo la ley por todas las razones correctas.
Esta serie es de las que más me ha gustado últimamente. No es que sea de calidad excepcional, pero cuenta con unos elementos cuya combinación me ha cautivado y enganchado episodio a episodio, semana tras semana.
He leído que está basada en una serie argentina que desconozco, aunque ahora me causa curiosidad. Aquí la protagonista es una inmigrante ilegal camboyana, una madre coraje que no puede evitar trabajar para la mafia armenia con tal de salvar la vida de su hijo.
Trabajando para los malos se encuentra el mexicano Adan Canto, al que conocí en The Following y me cautivó en Sucesor designado. Ese villano con, en el fondo, buen corazón, llega a enamorar.
La trama de la serie se va enredando y poniéndose más y más emocionante, hasta cerrarse en el último episodio. Lástima de la escena final que rompe la armonía quizás con la intención de continuar con una segunda temporada que es totalmente innecesaria.
1 comentario:
Cuando el sistema te abandona injustamente, ¡leña al mono! El primer deber es sobrevivir, aunque no a costa de inocentes. Por lo demás, se hace lo que se puede (y a veces, lo que se debe)
Publicar un comentario