Sinopsis:
María, una mujer andaluza dedicada a cuidar de su familia desde que murió su padre, decide sacrificarse por los suyos y acepta casarse con un terrateniente manchego que viene a su pueblo buscando esposa, a cambio de asegurarse el bienestar y el futuro de su madre y hermanos.
Sin salir del terreno patrio, he terminado los diez excesivos episodios de la serie Entre tierras, valga la redundancia. Es un culebrón rural de manual, creo que remake de otro italiano. Quizás la original funcionase, pero aquí no acaba de cumplir, y eso que cuenta con actores solventes como Megan Montaner (me encanta esta mujer), Unax Ugalde o Juanjo Puigcorbé.
Hay varios aspectos que chirrían, como que la protagonista, de origen almeriense, carece del mínimo acento de su tierra, a diferencia de los demás miembros de su familia. La ambientación rural castellana de los años sesenta o primeros de los setenta tiene un aspecto muy pulido, con objetos demasiado nuevos. Reconozco que al final ponía los capítulos de fondo mientras miraba el móvil o leía, y levantaba la vista de vez en cuando.
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