El sábado 4 hizo un día espléndido de sol y calor primaveral para celebrar la Primera Comunión de María . Menos mal, porque yo llevaba una blusa escotada de tejido vaporoso. Por la mañana, mi prima Laura me maquilló con bastante fortuna. La única pega es que debo de ser alérgica a algún componente porque me pasé el día lagrimeando y moqueando, lo que me restaba mucho glamour. En el próximo evento me tendré que limitar a pintarme los labios.
La ceremonia de la misa estuvo bonita aunque quizás un pelín larga. María, tan preciosa ella, no paraba quieta, supongo que deseando que terminara, aunque luego le esperaba la sesión de fotos con la familia.
De ahí fuimos a un restaurante en Novelda, el mismo donde celebró la boda del hijo de mi amiga Rosa. la boda del hijo de mi amiga Rosa. Degustamos unos platos elaborados deliciosos en buena compañía. Pedro y yo nos marchamos a media tarde pero la fiesta continuó hasta la noche. Dentro de tres años, Dios mediante, celebraremos la Primera Comunión de Marc.
2 comentarios:
¡¡Qué guapa iba!! Felicidades a ella y la familia. Tú también estabas bien molona con la blusa y el lipstick a juego :)
¡Gracias, amiga!
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