Eva

Sinopsis:
Marzo de 1937. Mientras la Guerra Civil sigue su trágico curso, una nueva misión lleva a Lorenzo Falcó hasta Tánger, turbulenta encrucijada de espías, tráficos ilícitos y conspiraciones, con el encargo de conseguir que el capitán de un barco cargado con oro del Banco de España cambie de bandera. Espías nacionales, republicanos y soviéticos, hombres y mujeres, se enfrentan en una guerra oscura y sucia en la que acabarán regresando peligrosos fantasmas del pasado.

Cuando reseñé en el blog Falcó, vaticiné que los personajes y el periodo histórico de la Guerra Civil española eran demasiado interesantes como para limitarse a un libro. Me alegra haber acertado porque así he podido disfrutar de esta continuación.

En primer lugar, es una delicia la prosa del autor y su preocupación por la palabra bien escrita. Diréis: es normal que un autor ponga especial cuidado en su expresión. Pues no, que se lee cada barbaridad por ahí que asusta.

Falcó es un antihéroe al estilo de los personajes de novela negra clásicos, de Dashiell Hamett, por ejemplo. Tiene su lado de James Bond avant la lettre, por seductor y por su despliegue de localizaciones mundiales que podría dar pie a múltiples novelas. Aunque Falcó trabaja de freelance para el bando nacional, no está por la causa, y reparte estopa dialéctica contra unos y otros. Frente a él, la Eva rusa que conocimos y con la que sufrimos en la primera novela. Con ella el autor denuncia el fundamentalismo de las ideas, que casi siempre camufla intereses económicos y que hace que mueran tantas personas.

En suma, una novela entretenida y bien escrita. Que cuente conmigo para la próxima entrega.