Waco

Sinopsis:
La trama de esta serie basada en hechos reales. Gira en torno a una secta que residía en el Monte Carmelo a las afueras de Waco, Texas. El FBI quiso intervenir en la hacienda de la secta, y su líder David Koresh tomó la decisión de que la única forma de salvarse era encerrarse. Así, casi 100 personas permanecieron bajo asedio durante 51 días. Finalmente, el 19 de abril de 1993 se produjo el ataque. Los agentes del FBI de los Estados Unidos asaltaron el lugar asesinando todo cuanto vieron, incluyendo a mujeres y niños. Perdieron la vida 86 personas inocentes, incluyendo a Koresh. 

Tenía un lejano recuerdo de los horribles sucesos transcurridos en Waco, Texas, que son los que narra esta miniserie. A lo largo de los seis episodios que la componen, me daba la impresión de que ese recuerdo estaba distorsionado porque no se correspondía con lo que veía. Tuve la tentación de buscar en la red y me contuve por seguir la trama con mayor interés.

La serie está basada en dos libros, uno escrito por el negociador del FBI (¡qué raro ver a Michael Shannon en un papel positivo!) y otro por uno de los supervivientes de la secta davidiana, que además es asesor de la serie, por lo que garantiza los puntos de vista desde fuera y desde dentro del complejo de Waco.

Con lo monísimo que es Taylor Kitsch, qué poco favorecido sale para encarnar al líder de la secta, personaje complejo donde los haya, que pasa de la lucidez al fanatismo religioso, de manera que el espectador no sabe a qué atenerse. No se puede hablar de buenos y malos. Lo que está claro es que la violencia no es el camino porque lo único que produce es retroalimentación. Tampoco son positivos los extremismos, ni religiosos ni políticos ni de ningún tipo. Y maldita la obsesión de los estadounidenses por las armas, que no saben vivir sin ellas y saben matar con ellas.

Una serie muy interesante que ofrece una versión más clara de lo que sucedió en aquel horrendo episodio.