Los componentes de este blog somos un grupo de amigos dispersos por el mundo que charlamos de lo divino y de lo humano. Desde el respeto y la buena educación, nuestras posturas coincidirán a veces, mientras que otras divergirán totalmente. Sin tratar de imponerlas a los demás, cada cual se responsabiliza de sus propias opiniones.
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Sed todos bienvenidos.
Esta es la historia de alguien que vive en un planeta muy particular: Barriga. En el planeta Barriga, ésta persona crece e imagina el mundo que le espera al otro lado. Descubre que hay más gente que viene de ese mismo lugar. ¡Descubre que todas las personas venimos de Barriga!
Hace dos domingos fui con mi hermana y su nieta Lucía a ver otra función de la Muestra de Teatro Infantil. El salón de actos estaba tan abarrotado que no pudimos sentarnos juntas.
Un espectáculo que habla de la esperanza, de lo pequeño hasta lo gigante, de la célula hasta el universo, del ser humano hasta el colectivo. Un espectáculo que habla de la potencia que tenemos cada persona al llegar a este mundo para cuidar y construir el planeta que queremos.
La representación estuvo muy entretenida, una metáfora de la llegada al mundo y la conmoción que supone para un recién nacido. Dicho así, puede sonar demasiado sesudo, pero fue todo lo contrario: un divertimento para pequeños y mayores, que acabamos cantando el tema que da título a la función.
Son de agradecer los guiños dirigidos a los adultos, obligados quizás a acompañar a los críos, que a estos se les escapan.
Cristóbal Balenciaga narra la historia de un hombre que se atrevió a desafiar su estatus social como hijo de una costurera y un pescador. Gracias a su talento natural para la alta costura, su trabajo constante y su olfato para los negocios, el español Cristóbal Balenciaga se convirtió en uno de los diseñadores de moda más destacados de todos los tiempos.
El problema de acudir a Bajanini Channel para descargarlas es que no se puede exigir lo mismo que a una plataforma al uso. Así, encuentro que algunas prescinden de subtítulos, lo que puede ser un inconveniente para los que no somos políglotas. Casi el cuarenta por ciento (cifra calculada totalmente a ojo) de la serie sobre el diseñador Cristóbal Balenciaga está hablado en francés, lo que he podido solventar, al igual de lo poquito que se dice en inglés. Pero ese diez por ciento de euskera, además de las cuatro líneas en alemán, me dejó totalmente perdida sin la muleta de los subtítulos.
Aparte de eso, es una delicia visual la recreación del París elegante entre los años treinta y setenta con los cambios históricos de la época, desde la ocupación nazi hasta el mayo del 68, con los maravillosos diseños del protagonista, minuciosos hasta la última puntada. Celosísimo de su vida privada y hasta de su imagen pública en medios de comunicación, está bien interpretado por Alberto San Juan.
Comparto esta noticia porque quien está a cargo de pintar el mural en el CEIP Mora Puchol de Alicante.es nuestro amigo Iván Ferrándiz Soler, con la ayuda de sus hijos Amaro y Romeo.
¡Enhorabuena, chicos!
La iniciativa "Pinta tu cole" busca revitalizar los espacios escolares a través de la rehabilitación de paredes, muros y la renovación de elementos como juegos de suelo, columpios o bancos. De la mano de Fundación Iniciativa Social, este proyecto se desarrolla desde hace 6 años por toda la Comunidad Valenciana con el objetivo de mejorar los entornos escolares para crear espacios más amables y que favorezcan el desarrollo del alumnado con dificultades.
Para ejecutar las actuaciones en los centros educativos, el programa cuenta con voluntarios, encargados de pintar los espacios, así como con la colaboración de Isaval Fabricantes y Distribuidores de Pintura, que proporciona el material necesario para desarrollar las acciones.
Una de las últimas actuaciones se realizó hace unos días en el CEIP Mora Puchol de Alicante, que destacó por el trabajo de los voluntarios que, con pinceles y rodillos en mano, dedicaron su tiempo y esfuerzo para embellecer el entorno educativo del centro alicantino. El artista Ymikai puso la guinda a la acción con el diseño de un mural realizado altruistamente.
Esta iniciativa se enfoca en el compromiso de las entidades participantes hacia la consecución del cuarto objetivo de la Agenda 2030: garantizar una educación de calidad que sea inclusiva y equitativa, además de fomentar la posibilidad de aprendizaje continuo para todas las personas.
"Estamos encantados con la ayuda que nos han proporcionado y que nos siguen proporcionando. Ahora el patio es un lugar más acogedor, más divertido y más propicio para el aprendizaje", señaló Beatriz Mayor, directora del Mora Puchol.
Verónica González, técnico de Proyectos de la fundación impulsora en Alicante, aseguró que "esta actividad tiene mucho trabajo detrás, pero el resultado final merece la pena. Queremos dar las gracias a Ymikai e Isaval por apoyarnos en esta acción".
El profesor de inglés y escritor Thelonious 'Monk' Ellison escribe una novela satírica bajo seudónimo, con la intención de denunciar la hipocresía de la industria editorial.
No es habitual que me atrape una película vista en casa, que al rato de ponerla me disperso y me dan ganas de perder el tiempo con el móvil. Con esta, al contrario, no me ha sucedido sino que me he enganchado a una historia que, a priori, no tiene conexión conmigo.
Sorprende el tono de comedia ácida, los diálogos inteligentes, los zascas que reparte a diestro y siniestro, entre otros, al mundo intelectual, al familiar, al literario, al editorial, al universitario, al cinematográfico, al policial, a las consecuencias de vender el alma y el talento a cambio de poder pagar una residencia a una madre con alzhéimer.
Por muy lejanos que parezcan los personajes, empatizamos con ellos, interpretados por un elenco ideal.
No me extraña que tenga nominaciones en los principales premios.
Os mostraremos en este libro el proceso de transformación de Eva Carrasco en médium. La multitud de experiencias que Eva Carrasco vive en el contacto con seres que cruzaron «al otro lado» nos hace estar convencidos de la existencia de la vida después de la vida. Sensaciones, voces, grabaciones, relatos, sueños y testimonios, avalan lo que, sin lugar a dudas, representa para nosotros una comunicación con el mundo de los espíritus.
En las últimas jornadas del II Congreso de Misterio Villa de Agost en noviembre del año pasado, asistí a una ponencia titulada Médium: contacto con seres interdimensionales, a cargo de Eva Carrasco y Pedro M. Girón, donde la primera relataba su experiencia con ángeles y otros seres lumínicos cuya existencia documentaba con vídeos.
Con el montón de libros pendientes, no le había prestado atención hasta hace poco. Lo he leído con interés, planteándome si yo me animaría a solicitar la mediación de personas como Eva para ponerme en contacto con seres queridos que se fueron.
Confieso que me debatía entre el escepticismo y la ilusión por creer; con todo, adquirí este libro que estaba a la venta en la Casa de Cultura junto a otros ejemplares de temática esotérica.
Cuando pedí a la propia Eva que me dedicara y firmara el libro me dijo cosas muy bonitas, como que yo irradiaba luz. La hija de ambos -creo- nos hizo unas fotos y cuál sería mi sorpresa cuando las vi en casa: en una aparece difuminado su rostro, solo el suyo, mientras que la otra es normal. No me negaréis que da que pensar.
Mayo de 2017. El cadáver de un hombre aparece calcinado en el interior de un coche en el pantano de Foix, en Barcelona. Se trata de Pedro, un agente policial. El suceso despierta rápidamente el interés de la opinión pública, y más a medida que la investigación va revelando una red de relaciones tóxicas, engaños, violencia y escándalos sexuales que involucran a Pedro y dos de sus compañeros policías: su pareja Rosa y el exnovio de ésta, Albert.
Hace unos días apareció en los medios una noticia relacionada con Rosa Peral, la protagonista del truculento crimen de 2017 del que aún se habla. Me recordó la serie de Netflix que lo recrea y me puse a verla.
Para empezar, un aplauso para Úrsula Corberó por la recreación de un personaje tan sumamente complejo, tanto que no acabo de entender su motivación para llegar a actuar como lo hizo. En cambio, me costó un poco más conectar con la interpretación de Quim Gutiérrez de su tontolaba violento.
Otra cosa que me chocó fue, como suele pasar en casos donde se emplean dos lenguas como el castellano y el catalán, que se pasa de una a otra sin sentido en el mismo diálogo.
Casi al final -cortita que soy- me percaté del doble significado del título: el fuego de la pasión que consume a los personajes y el que calcina el cadáver de la víctima.
Y qué buena banda sonora con canciones emblemáticas en español que conectan con el contenido de cada episodio.
Tras el show de Las noches de Ortega, esperamos a que saliera Juan Carlos Ortega y nos saludó muy afectuosamente. Sabiendo que es de Barcelona, le hablé en catalán pero solo me respondía en castellano, así que claudiqué. Supongo que se encuentra más cómodo en el idioma en que escenifica su espectáculo.
A nuestro agradecimiento por el rato tan divertido respondía dándonos las gracias por haber asistido. Le aseguramos que volveríamos a verlo en su siguiente show. Una velada sumamente agradable.
Siempre devuelvo los libros que me prestan. No me gusta subrayar ni apuntar nada en sus páginas. No suelo releer porque tengo montones de pendientes, tanto en papel como en digital. Y soy muy regaladora de libros.
En cuanto a cazadora de autógrafos, lo cierto es que tengo unos cuantos firmados, unos sesenta, la mayoría de autores poco conocidos, y me encanta esta colección.
Cuatro relatos abocados a despertar conciencias que, aunque a priori pudiesen parecer «cuentos mágicos», sin embargo, profundizan en la esencia más pura del ser humano en un recorrido al entendimiento en la disección de sentimientos.
Perfecta autopsia que deja al descubierto falsos perjuicios e inútiles corazas que merman ese derecho innato a sentir.
Responsables y honestos al invulnerable brillo del alma.
Mirando el estante donde tengo los libros pendientes de lectura, que siguen siendo demasiados, me di cuenta de que se encontraba entre ellos este volumen, muy pequeño de extensión pero denso en contenido.
Escrito por mi tocaya Concepción Sánchez Sánchez, lo tengo gracias a un sorteo que gané en Instagram el pasado verano. La autora, amabilísima, me lo envió dedicado y firmado, primorosamente envuelto con un lazo rojo, tan bonito que me hice una foto con él.
En el libro predomina la prosa entre filosófica y, sobre todo, poética. Combina la narración con las reflexiones de tono calentito, que consuela y conforta el corazón.
No es una lectura banal, de usar y tirar, sino que aprecia un repasito que le daré pasado el tiempo.
Cuando las tramas de sus libros empiezan a parecerse demasiado a las actividades de un siniestro sindicato clandestino, la introvertida autora de novelas de espías Elly Conway y su gato se ven inmersos en el verdadero mundo del espionaje…, donde nada ni nadie es lo que parece.
No voy a mentir: mi principal interés a priori para ver esta película era Henry Cavill, a pesar de su pelo pincho. Por desgracia, no es un papel protagónico y no sale tanto como me gustaría, pero no me arrepiento de haberla visto porque, sin ser en absoluto redonda, está bastante entretenida y no estoy de acuerdo con las críticas que la despedazan.
Es un carrusel de giros argumentales que no importa que no sean el colmo de la verosimilitud ni falta que le hace. Combina la acción propia de una cinta de espías con una comedia romántica con una pareja quizás con déficit de química: yo no habría imaginado a Sam Rockwell como héroe enamorado, pero funciona.
Y qué total el gato de la protagonista, que roba la película.
Soy golosa, lo admito, así que procuro asociar algún dulce a cada fiesta.
Una semana antes de San Valentín vi esta especie de bizcocho de chocolate en un supermercado que me pedía que me lo llevase a casa. Estaba relleno de mermelada de fresa, por lo que me recordaba a un Bony, un pastelito de mis años mozos.
Aunque a ninguno de los dos nos hace falta, le preparé a Pedro una caja sorpresa con aperitivos salados de su gusto y unas chuches de temática corazonera.
Como el año pasado, compré en la panadería Sant Roc una tartita deliciosa con cobertura de trufa y crema tostada, y relleno de nata. Que conste que nos duró varios días.
Margot y David provienen de mundos diferentes. Ella es heredera de un imperio hotelero. Él debe desempeñar tres trabajos para llegar a fin de mes. Pero cuando sus caminos se unen, se dan cuenta de que solo entre ellos pueden ayudarse a recuperar el amor de sus vidas.
Esta miniserie de Netflix es ideal para románticos acérrimos y más en la semana de San Valentín, tal cual como reza su título, una delicia.
Vaya por delante que no he leído la novela en que se basa; de hecho, creo que de Elísabet Benavent solo he leído Persiguiendo a Silvia, por lo que entono el mea culpa, que si es tan superventas por algo será.
La serie no descubre nada nuevo ni falta que le hace, que los tópicos de la comedia romántica funcionan si están bien escritos o filmados.
Lo que también contribuye a dicho funcionamiento es el trabajo eficaz y encantador de la pareja de actores protagonistas: Anna Castillo y el monísimo Álvaro Mel. La química entre ellos refuerza la eficiencia de la trama.
Las noches de Ortega es un show en directo con una mecánica ligada al particular universo de Juan Carlos Ortega y al humor que le caracteriza.
Incluirá sus peculiares llamadas, proyección de vídeos y personajes tan reconocidos como Marco Antonio Aguirre, entre otros.
Tras la divertida experiencia con Berto Romero, mi sobrino me sugirió ir a ver el monólogo de Juan Carlos Ortega el viernes 9. Servidora se apunta a un bombardeo, ya lo sabéis, así que asentí con entusiasmo, lo mismo que mi amiga Nati.
Conocía al humorista por sus colaboraciones en programas de Buenafuente y ya me partía de risa con él con su interpretación de los típicos programas radiofónicos donde la gente llama para contar sus cosas, por no decir sus miserias. Las voces de los interlocutores son suyas también, pero, como no queda bien en escena, aparte de agotador, imagino, dichas voces suenan grabadas, por lo que Ortega ha de estar finísimo a la hora de interactuar justo a tiempo. El resultado es hilarante, mezcla de absurdo, procaz, nostálgico y siempre jocoso.
Cerró los ojos y sonrió, esto era una batalla donde solo había una oportunidad.
Y él, lucharía porque no había nadie que pudiera dar Jaque al rey.
¡Bienvenidos al Big Bang!
Este libro es otro de los que he ganado en un sorteo de Instagram. La autora tuvo la amabilidad de enviármelo dedicado y firmado, además de marcapáginas y tarjetas.
Tengo entendido que el género de fantasía vuelve a estar de moda entre los lectores jóvenes, de lo que me alegro.
En mi caso, me remonto a las novelas de la saga True Blood para encontrar tramas donde coexisten vampiros y hombres lobo, aunque en el libro de Sara aumenta el espectro de seres especiales a magos y elfos, con alianzas y enfrentamientos entre ellos.
No obstante, me costaba entrar en la historia pues -pura deformación profesional- detectaba, entre otras erratas, tildes y comas que faltaban o que sobraban.
Con esto en mente, escribí a la escritora por privado:
Y me contestó lo siguiente:
¿Aprender? ¿Qué va a aprender si ni siquiera me pregunta por un ejemplo de dichos errores? Lo que me lleva a pensar que la figura del corrector profesional se puede morir de hambre.
Tras sobrevivir al ataque de Godzilla en San Francisco, un espeluznante secreto vuelve a sobrecoger a Cate. En medio de amenazas monstruosas, se embarca en una aventura por todo el mundo para descubrir la verdad sobre su familia y la misteriosa organización conocida como Monarca.
La serie se centra en la empresa Monarch, en su origen y en su presente, la que lidia con los bichos gigantescos, no solo los mencionados sino que los vemos de todas clases y no faltan en ningún episodio. ¡Con lo repulsivos que son! Y lo peor es que casi son lo mejor de la serie, ya que el resto se rellena con relaciones personales y familiares que tampoco interesan demasiado.
Como curiosidad, el personaje que interpreta Kurt Russell lo encarna su propio hijo, Wyatt Russell en décadas anteriores.
El cine español de 2023 nos ha vuelto volviendo a sorprender: Juan Antonio Bayona coronó la montaña de los Premios Goya 2024 con los 12 galardones de La sociedad de la nieve que ya le hacen soñar con el Oscar en la gala de Sigourney Weaver y del "se acabó".
Con Ana Belén y Los Javis como maestros de ceremonias, la ceremonia ha contado con la presencia de intérpretes como Penélope Cruz, Carmen Machi, Elena Anaya, Marisa Paredes, Susi Sánchez, Bárbara Lennie, José Sacristán, Gael García Bernal y Eduard Fernández, además de cineastas como Pedro Almodóvar, Carla Simón, Isaki Lacuesta, Alauda Ruiz de Azúa, Borja Cobeaga, Javier Fesser, Pilar Palomero, Fran Araújo, Jonás Trueba y Jaione Camborda.
A pesar de no partir como la película más nominada al empezar la noche, desde el principio tenía pinta de que La sociedad de la nieve iba a arrasar con todo en los Premios Goya 2024, sobre todo cuando encadenó 10 galardones seguidos. La cinta de J.A. Bayona, quien se llevó el Goya al mejor director, acaparó la gran mayoría de las categorías técnicas, además de la de actor revelación (para el argentino Matías Recalt), para amasar un total de 12 galardones de los 13 a los que optaba después de hacerse con el más importante de todos, el de mejor película.
20.000 especies de abejas, la ópera prima de la directora Estibaliz Urresola que trata sobre la infancia de una niña transexual y que partía como la más nominada con 15 candidaturas, fue premiada con el Goya a la mejor dirección novel para la realizadora vasca, mejor actriz de reparto para Ane Gabarain y mejor guion original.
Las otras dos película más nominadas (con 11), Cerrar los ojos, el esperado retorno de Víctor Erice, y Saben Aquell, el biopic del humorista Eugenio dirigido por David Trueba, se tuvieron que conformar con solo dos premios cada una, aunque ambos de altura: mejor actor de reparto para Jose Coronado por la primera y mejor actor para David Verdaguer por la segunda.
El premio a mejor actriz recayó en Malena Alterio (Que nadie duerma), mientras el de actriz revelación fue a parar a Janet Novás (O corno). El de mejor guion adaptado fue a parar a Robot Dreams, de Pablo Berger, que también se llevó el de animación (categoría en la que optará al Oscar).
Pedro Almodóvar volvió a reunir en el escenario a las actrices del reparto de Todo sobre mi madre 25 años después. Penélope Cruz, Marisa Paredes, Cecilia Roth y Antonia San Juan rememoraron una de las escenas de la película que ganó seis premios Goya y un Oscar de Hollywood.
Recreando el selfie más viral de la historia de los Oscar, los Javis y Ana Belén reunieron a algunos de los actores que no han ganado todavía un Goya como Inma Cuesta, Hugo Silva, Tristán Ulloa, Loles León, Leonor Watling y Ernesto Alterio, entre otros, para hacer el selfie de la gala. A diferencia de Hollywood no fueron inmortalizados por los maestros de ceremonias, sino por Isabel Coixet, la mujer con más Goyas del cine español, ocho cabezones.
Sigourney Weaver, la recordada teniente Ripley de Alíen o Dian Fossey en Gorilas en la niebla, recibió una gran ovación al ser galardonada con el Goya Internacional, que recibió de manos de Juan Antonio Bayona, su director en Un monstruo viene a verme. La actriz tres veces nominada al Oscar, ganadora del BAFTA y del premio Donostia pronunció parte de su discurso en español y volvió a estrechar sus lazos con el cine español al sugerir a modo de broma a Almodóvar que podría trabajar con él ahora que el cineasta ha comenzado a rodar en inglés, y rindió homenaje a su actriz de doblaje, María Luisa Solá. "Estoy abrumada, me hacéis sentir como una verdadera reina", ha señalado tras pasar a formar parte de la gran familia del cine español.
Los Smith, John y Jane, han abandonado sus identidades para estar juntos como compañeros, en el espionaje y en el matrimonio. Emparejados por una misteriosa agencia que les asigna diferentes y peligrosas misiones, cuando las grietas empiezan a aparecer, deben luchar para permanecer juntos. Porque en este matrimonio, el divorcio no es una opción.
Pedro y yo hemos visto la serie Mr. & Mrs. Smith, título sin traducir. No recuerdo apenas la película original, lo que da igual, ya que he leído que tienen poco que ver.
El comienzo es prometedor, sin duda lo mejor de la serie: sale Alexander Skarsgård, más guapo imposible, y lo matan a los dos minutos o así, y no, no vuelve a aparecer. Frustración a más no poder. Luego me di cuenta de que en cada episodio sale una estrella invitada de renombre, que creo que va a hacer caja y poco más.
El signo de los tiempos obliga a que, en lugar de los muy caucásicos Pitt y Jolie, los nuevos protagonistas sean un negro y una asiática. Nada que objetar, faltaría más, si al menos la química entre ellos se acercara a la de los otros. Tampoco encuentra el equilibrio entre escenas de acción y diálogos en plan parejita.
Clara es una escritora uruguaya, que huye a las sierras buscando alejarse de una tumultuosa relación de pareja, y terminar de escribir el libro, para el cual nunca encuentra tiempo. Desconectada de toda tecnología, ignora que un virus ha llegado a Uruguay, y que tanto su país, como su familia, están viviendo uno de los peores momentos. Marcos es viudo, un atractivo hombre de campo, que se acerca a Clara intentando alejar la soledad por una noche. Para terminar envuelto en una historia de amor y pasión, que amenaza con destrozar el paraíso que tanto trabajo le dio reconstruir.
Una historia actual, con tintes eróticos, que nos pasea por los íntimos dramas de nuestra sociedad, maltratos incluidos y violencia de género, las relaciones de pareja y amigos, mostrando ambas caras de la moneda, en medio de la crisis. Nadie estaba preparado para una pandemia.
Desde luego, habría sido difícil que la misma historia hubiera transcurrido igual en España con las limitaciones tan restrictivas de movilidad y reuniones que teníamos en pandemia. Puede que en Uruguay la incidencia fuera mucho menor ya que las normas aquí descritas parecen más permisivas.
Esperamos al final de la función Lo nunca visto para saludar a Berto Romero y para que me firmase su libro En ocasiones veo pelis. Estuvo muy atento y amable con todos nosotros mientras le agradecimos lo bien que lo habíamos pasado, y, en contraparte, aguantó mi reproche, el de alguien totalmente en contra del género de terror, de que por su culpa pasé miedo en su serie El otro lado.
Berto se disculpó porque solo había sido un poquito ("una mica", ya que hablamos en catalán) y que no lo volvería a hacer. O sí. Lo curioso es que este fragmento de conversación lo registró en vídeo mi sobrino sin yo percatarme. Un divertido recuerdo que adjunto.
Faltan dos semanas para la boda de la teniente Valentina Redondo y Oliver Gordon. En plenos preparativos, los sorprende la noticia de un atentado masivo en el Templo del Agua del famoso balneario cántabro de Puente Viesgo.
Las instalaciones del idílico paraíso de agua estaban ocupadas por un grupo de empresarios, y todo apunta a que la masacre ha sido perpetrada con una peligrosísima arma química. Valentina tendrá que cooperar con el ejército y con un equipo de la UCO para resolver el crimen.
Las anteriores novelas de la serie Puerto Escondido, de María Oruña, han pasado por el blog, y esta no podía faltar.
Aparte del atractivo de las tramas y del misterio que plantea, sus libros no cansan porque los enfoca como géneros diferentes. Así, aquí encontramos un ataque a un lugar público con un arma química, con todos los muertos que comporta y el posterior paseo por todos los sospechosos que tanto nos hace tropezar y sufrir.
Leyendo el libro en digital, me topé con una falta de ortografía grave, muy impropia de María Oruña. Le hice la foto que podéis ver y se me ocurrió ponerme en contacto con la autora por mensaje directo en Instagram.
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