sábado, 10 de octubre de 2015

Black Mass. Estrictamente criminal



Sinopsis:
En el sur de Boston, en la década de 1970, el agente del FBI John Connolly (Joel Edgerton) convence al mafioso irlandés James “Whitey” Bulger (Johnny Depp), un delincuente recién salido de la cárcel, para que colabore con el FBI y elimine a un enemigo común: la mafia italiana. Se formará así una nefasta alianza que provocó una espiral fuera de control, permitiendo a Whitey escapar del ámbito de la ley, consolidar su poder y convertirse en uno de los más implacables y poderosos gángsteres de la historia de Boston. 

Para mi grata sorpresa, he encontrado en Bajanini Channel Black Mass en VOSE. La imagen no es perfecta pero ni de lejos tan mala como otras que están subidas a la red.


Johnny Depp nunca ha sido santo de mi devoción, ni física ni actoralmente. No aguanto sus histrionismos ni sus sobreactuaciones. Así pues, no he visto esta película por él. Podría argumentar que se debe a que me agrada el subgénero mafioso (lo que no es falso, aunque prefiero la modalidad de aspecto glamuroso) pero he de admitir que el motivo principal es la presencia de Benedict Cumberbatch. Sale en diversos momentos de la película, de principio a fin, pero sumados todos no llegan a los cinco minutos. Una pequeña decepción. Eso sí, está muy guapo puesto de traje interpretando al senador hermano pequeño del protagonista. Lo que me resulta raro es oírlo hablar con acento bostoniano como si tuviera la nariz congestionada y la boca llena de chicle. ¡Con lo perfecto y seductor que es su acento inglés!


Volviendo a la película, me han atrapado los chanchullos entre el crimen organizado irlandés y el FBI para acabar con la mafia italiana, lo que beneficiaba a ambas partes. El hecho de que se trate de un hecho real pone los pelos de punta al pensar cuántos arreglos de esos habrá entre criminales y fuerzas del orden.
Para no faltar a la verdad, reconozco que Depp está ajustado, contenido incluso, para lo que podría haberse desmadrado en un papel así en el que, como es su costumbre, aparece fuertemente caracterizado. Además de Ben, el resto de secundarios están espléndidos, desde Joel Edgerton a Kevin Bacon, pasando por el último calvo sexy, Corey Stoll.

Dos apuntes para concluir. No sé exactamente a qué se refiere el título, lo que pasará a más de uno: en México la han llamado Pacto criminal, bien descriptivo, como tiene que ser. Sin dejar a los hermanos hispanos, se nota que los subtítulos son de algún país de allá: los incontables fuck, cuando no son ignorados, son traducidos como maldito y si le sigue you! es ¡Al diablo!. Benditos sean.



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