martes, 16 de diciembre de 2008

La esencia del mal


Sinopsis:

Julius Gorner es un nombre que James Bond no olvidará jamás; el de un hombre que sólo obedece a su propio ego enloquecido por el poder, cuya riqueza sólo es menor que su codicia y que no se detendrá ante nada hasta haber destruido Gran Bretaña. Una feroz ejecución en las desoladas afueras del París de los sesenta desencadena una serie de sucesos destinados a provocar una catástrofe mundial: una invasión letal de narcóticos amenaza Gran Bretaña, un avión comercial desaparece sobre Iraq y el rumor de una guerra inminente sacude a Oriente Medio.

Hay que tener mucho morro para ponerse a continuar las aventuras de James Bond sin ser el autor original. Que conste que no soy fan de Ian Fleming pero pretender imitar su estilo con el único interés de hacer caja roza la mayor caradura. Es cierto que los libros de Ian Fleming tampoco son gran cosa (no recuerdo cuál de sus novelas leí que me aburrió tanto que me maravillé que de allí se hubiese podido pergeñar una película entretenida), y que lo mejor que se puede decir de ellos es que crearon un personaje de fama mundial, ese 007 mujeriego y lleno de clase que sobrevive a todo gracias a su suerte increíble y a su fuerza de voluntad, pero esta novela es aburridísima, insufrible e infumable, un libro que iría directamente a mi hoguera virtual si me lo hubiese comprado; por suerte, es de la biblioteca.


El malo y sus secuaces parecen sacados de una peli de Austin Powers; el momento de mayor enfrentamiento se da en un partido de tenis entre Bond y el villano narrado en ¡quince páginas!; la relación con la chica da risa, además de que su presunto misterio se adivina a las pocas páginas.


Por supuesto James está rodeado de lujo y de sus gustos caros, especialmente en París, pero también en Persia, en Teherán, un lugar descrito por el autor como si se hubiese leído un par de guías de viaje de los 70 antes de empezar, ni que James Bond fuese un turista…Los lugares donde tiene lugar la trama son o exóticos o de lujo, siguiendo el estilo Fleming, pero están narrados de forma aburrida.

En resumen, no creo que se haga una película de este libro.

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